El novenario del Niño Dios es una tradición que por años se ha desarrollado en la catedral Metropolitana y esta vez no es la excepción: más de 500 niños de todas las edades y de los barrios cercanos al templo se hicieron presentes para rezar y hacer algunas peticiones especiales al Salvador del Mundo.
El sacerdote Julio de los Santos Dávila, rector de Catedral, manifestó que la celebración en honor al Niño Dios, es la oportunidad para enrumbar a los menores en los caminos de la fe y los principios cristianos.
“Es bueno que los niños se evangelicen todo el año, porque la palabra de Dios nos evangeliza y nos acerca a Jesucristo. La niñez es el futuro de nuestro país y debemos de recordar que una sociedad sin Dios, es una sociedad sin principios. Todos deben perseverar la fe porque hay que alimentarla para mantenerla fortalecida y viva, ya que un hombre sin fe, es un ser humano lleno de tristeza y sin aspiraciones” destacó.
El novenario está previsto a finalizar el próximo 24 de diciembre, fecha en la que el pueblo católico celebra la víspera de la llegada del Salvador al mundo. En su sexto día de novenario, los niños destacan que no han dejado de asistir desde el primer día, tomando en cuenta que la celebración está llena de regocijo.
“He venido desde el primer día porque es alegre, rezamos, le pedimos al niño Dios por nuestra salud, por nuestros padres, abuelitos y por todos los niños del país” destacó la pequeña Karla Ramírez.
“Siempre vengo con mi abuelita, ella nos ha enseñado que debemos de tener fe en el niño Dios para que el siempre nos cuide, nos ayude a salir adelante y cuide a nuestros padres” expresó Armando Cáceres.
De igual manera, los padres de familia, afirman que como buenos cristianos han venido inculcando a sus hijos el amor y la devoción por Jesucristo en su etapa infantil, así mismo, afirman que el mensaje que a diario le brindan los sacerdotes a los pequeños, les permite ir conociendo más a profundidad las historias bíblicas.
“Todos los padres estamos en la obligación de traer a nuestros hijos a las actividades religiosas para que ellos vallan formándose dentro de la fe y el día de mañana sean hombres y mujeres de bien para nuestro país, que tomen de ejemplo a Jesucristo y sigan sus pasos tal y como él nos lo manda en las escrituras” señaló Fátima García.
Al finalizar el rezo, los niños disfrutan de un pequeño refrigerio, mismo que es elaborado por los religiosos, quienes a su vez les estarán entregando juguetes el próximo 24 de diciembre, fecha en la que concluyen los nueve días de actividad.
Esta entrada fue modificada por última vez el 21 de diciembre de 2015 a las 5:21 PM