Era el momento más esperado de la noche, el medio tiempo de la Super Bowl 50 cuando de entre el gentío del escenario salió Beyoncé. Su atuendo, un claro homenaje y guiño a la chaqueta con la que Michael Jackson actuó en la Súper Bowl de 1993 y su pelo rizado al viento completaban un look muy sexy.
Foto: FB/Beyoncé
Con una coreografía ensayada hasta la saciedad y unos movimientos pélvicos de lo más sensuales, Beyoncé avanzó hasta la punta del escenario para luego echar para atrás, dar un traspiés y estar a punto de darse con el pompis en el suelo.
Pero finalmente no sucedió, un doble paso hacia atrás la salvó del bochorno de ser vista por 130 millones de personas y que su caída pasara a los anales de la historia como una de las anécdotas del evento deportivo del año.
FUENTE: www.telemundo.com
Esta entrada fue modificada por última vez el 8 de febrero de 2016 a las 10:53 AM