OPINIÓN / Sheinbaum, le clava las banderillas al toro Trump, escrito por Stalin Vladimir Centeno.
El próximo dictador de turno en la Casa Blanca, Donald Trump, es el típico vecino indeseable que nadie en el barrio quisiera tener. Trump aún no ha puesto un pie en la oficina oval y ya está buscando pleito con su vecina, la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, a la que quiso amedrentar anunciando su intención de imponer un arancel del 25% a las importaciones provenientes de México y Canadá, como parte de una medida para presionar a ambos países a frenar la migración y el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos. Esta decisión, que podría implementarse en su primer día de gobierno el próximo 20 de enero, ha generado preocupación tanto en México como en su vecino del norte. México exporta principalmente autopartes, automóviles ligeros, camiones, procesadores de datos y tractores a Estados Unidos, productos que representan más del 30% de sus exportaciones totales a este país.
Trump, que tiene las manos extremadamente pequeñas, parece que sufre de algún complejo de inferioridad y por ello tiene la necesidad de hacerse notar. Primero dijo que acabaría en un abrir y cerrar de ojos con la guerra entre Ucrania y Rusia, más antes en campaña decía que era el único que podía evitar la III Guerra Mundial, hace poco, ya como Presidente Electo, anunciaba que deportaría a millones de inmigrantes y ahora decide perentoriar a la sucesora de AMLO.
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Es importante detallar que un arancel tan alto incrementaría los precios, afectando directamente a la competitividad de estas industrias. Además, sectores como el textil, alimentos y bebidas también enfrentarían un impacto significativo, pues dependen en gran medida del mercado estadounidense. Pero aquí esto apenas comienza y viene lo más interesante. Trump creyó que ya se había echado a la bolsa a la primera mujer Presidenta en la historia de México, pero resulta que Sheinbaum, vio en Trump un toro agresivo y decidió tempranearlo ensartándole las banderillas para marcar terreno y demostrar quién en realidad manda ahí. Su respuesta seguramente el pelirrojo no la vio venir, pues Sheinbaum aseguró que responderá con medidas equivalentes si los aranceles se materializan, enfatizando la necesidad de cooperación y diálogo. Señaló que las medidas arancelarias podrían desestabilizar las economías de ambos países, contraviniendo los principios del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
LA POLÍTICA EXTERIOR DE TRUMP Y SHEINBAUM
Me pregunto si Trump estará bien asesorado sobre materializar esa amenaza, porque esta política también podría perjudicar a los consumidores estadounidenses, ya que provocaría un aumento en los precios y posibles interrupciones en las cadenas de suministro, afectando a ambas economías de manera significativa.
Después de un cruce de espadas entre Sheinbaum y Trump, era hora de chocar de frente a ver quién de los dos sobreviviría. Ambos equipos presidenciales acordaron una llamada telefónica y la misma se produjo; «See you soon«. Nos vemos pronto. Le dijo Sheinbaum en un fluido inglés al próximo dictador del imperio yanqui. La jefa del Estado mexicano informó que la conversación fue cordial y que augura buenos tiempos para la relación bilateral, a pesar de las amenazas que el copetudo ha vomitado contra México una vez que tome posesión del cargo. “Fue una llamada muy cordial, quiero destacar esto. Él inició la conversación felicitándome por el triunfo en las elecciones de junio, pues le devolví la felicitación, evidentemente, para eso era la llamada, para felicitarle por el triunfo”, expresó la líder mexicana en su conferencia Mañanera.
Así mismo, en dicha comunicación, Trump fue el primero en tocar el controversial tema de la frontera, así lo detalló la mandataria; Trump “planteó el tema de la frontera”, sin dar más detalles al respecto. “Así nada más lo dijo, y yo le dije: ‘Sí, está el tema de la frontera, pero va a haber espacio para poderlo platicar”, ha compartido Sheinbaum. El republicano ha anunciado que impondrá un arancel a las importaciones mexicanas del 25% como método de presión para que su socio comercial tome medidas drásticas contra la inmigración y el narcotráfico.
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Trump seguramente hizo una lectura rápida y comprendió que la mandataria mexicana estaba dispuesta a darle pelea, por lo cual decidió suavizar el encuentro, por lo menos es lo que dijo la Presidenta.
Sheinbaum señaló que Trump, que llega por segunda vez a la presidencia de EE. UU., le invitó a la ceremonia de investidura. “Esto que salió en los medios de que si me invitó a la toma de posesión y todo esto, me dijo: ‘See you soon’, o sea, ‘nos vemos pronto’; le dije: Sí, nos vemos pronto”, ha compartido. La mandataria dejando abierta la posibilidad de acudir al acto protocolario, lo que confirma la prioridad de su mandato en cuanto a la política exterior.
Esta entrada fue modificada por última vez el 11 de diciembre de 2024 a las 12:58 PM
