Estados Unidos, el verdadero patrocinador del terrorismo

Imagen Cortesía / Potada de Stalin Magazine.

Por: Stalin Vladímir 

El karma, revolcó y machacó al contrarrevolucionario Luis Posada Carriles, nacido en Cienfuegos Cuba el 15 de febrero de 1928, estudiante de química y años después experto en terrorismo.

Algunos de sus tantos alias fueron: «Bambi, Ramón Medina, Ignacio Medina, Juan José Rivas, Julio César Dumas, Franco Rodríguez Mena entre otros. Posada fue agente de la (CIA) entrenado en la Escuela de las Américas en Fort Bernning, estado de Giorgia, recibió adiestramiento en explosivos, interrogatorio y asesinatos en los años 60s. Después formó parte de peligrosas organizaciones contrarrevolucionarias creadas por el imperio yanqui. Y aquí viene el «karma» del cual les comenté al principio, en sus años de vida Luis Posada Carriles sufrió varios accidentes de tránsito, además sus socios delincuentes lo intentaron matar en Guatemala de seis disparos. Al balearlo le hirieron el brazo, otro proyectil entró por su espalda, uno por el pecho, otro más en la mandíbula y otra de las balas le cercenó una parte de la lengua que le dejó con dificultades del habla.

Estuvo preso en Venezuela, Panamá, Miami y Nuevo México, sufrió de varias enfermedades, sobrevivió a un cáncer de garganta y padeció de un derrame cerebral.

El «héroe de la gusanera anticastrista de Miami» murió por acumulación de fluido en los pulmones el 23 de mayo de 2018 en horas de la madrugada en el Memorial Regional Hospital Hollywood, Florida. Murió como un perro, viejo, solo y abandonado a los 90 años, pero antes de su deceso pasaba sus días en un hogar para veteranos en Miramar al norte de Miami, lamentando seguramente no haber podido matar a Fidel Castro, mucho menos derrocar a la Revolución cubana y viviendo sus últimos miserables días, del dinero que la gusanera anticastrista de Miami le daba por comprar sus pinturas desfiguradas, sus cuadros descoloridos y sin sentido ni alma.

Eso sí, este terrorista, murió en un hospital gringo sin ser juzgado, enjuiciado, procesado ni condenado. Estados Unidos, le dio inmunidad e impunidad pues en su lógica de los políticos de Washington, posada era «un terrorista, pero era su terrorista.» La trayectoria delincuencial de este genocida anticastrista, chorrea sangre y pus. En 1961 Posada Carriles participo en la fallida invasión de Cuba en la Bahía de Cochinos, impulsada y financiada por el imperio yanqui. Después se vendió a la agencia de la CIA y les sirvió en cuerpo y alma hasta mediados de los 70.

En 1976, después de perpetrar la voladura contra un avión civil en pleno vuelo de Cubana de Aviación en el que murieron 73 personas inocentes, fue encarcelado en Venezuela. Documentos desclasificados por el FBI y la CIA muestran que agentes de Estados Unidos recibieron información según la cual Posada Carriles estuvo involucrado en esos ataques.

Lamentablemente fue absuelto por un tribunal militar en Venezuela, pero se escapó de la cárcel mientras estaba siendo juzgado por una corte civil. El terrorista Posada Carriles también fue acusado de organizar una serie de ataques contra hoteles en Cuba en 1997 en los que murió un turista italiano.

En 1971 Posada Carriles intentó asesinar al Comandante Fidel durante una visita que el líder de la Isla realizaba en Chile. Carriles era miembro activo de la CIA. El plan era esconder un revólver en una cámara de cine la cual llevarían dos aliados de Posada, estos ya se habían acreditado como periodistas venezolanos en Chile y esperaban una conferencia de prensa en la que asistiera Fidel para ahí mismo ejecutar el crimen pero este falló y una vez más el Presidente cubano salió ileso.

Después en el año 2000 mientras el líder de la revolución cubana se encontraba en una cumbre Presidencial en Panamá, fue el mismo comandante que denunció que Posada Carriles también se encontraba en el país canalero para atentar contra su vida, poco después Carriles junto a otros fue detenido en ese país y condenado a 8 años de cárcel, pero fue puesto en libertad en 2004 por la Presidenta Mireya Moscoso la cual en su última semana en el poder, lo perdonó. Carriles se fue de inmediato hacia el imperio gringo donde era esperado con los brazos abiertos.

Luego Posada, fue detenido en Estados Unidos tras haber ingresado otra vez de manera irregular en el país desde México en 2005.

Pero la justicia y la política del imperio estaban amarradas y el viejo Carriles no fue procesado por cargos de terrorismo. En su lugar fue acusado de mentir a los funcionarios de inmigración, meses después fue absuelto y vivió en total impunidad en miami participando de actividades proselitista con la gusanera anticastrista. Posada Carriles era solicitado en extradición por los gobiernos de Cuba y Venezuela pero el imperio yanqui evitó que la mano de la justica castigara a su agente.

Estados Unidos mantiene injustamente al Gobierno de Cuba, en una lista negra inventada por ellos mismos en la que acusan a la Isla de ser patrocinador del terrorismo. Sin embargo ante las evidencias históricas que hemos expuesto en esta edición, queda claro que el único patrocinador, defensor y protector del terrorismo son los Estados Unidos. Ah, ¿no me creen? pregúntenle a Luis Posada Carriles que mientras se fríe en una paila a fuego lento en el infierno, estoy seguro que estará dispuesto a confirmarlo, porque al tal Posada, además de terrorista confeso siempre le gustaba el protagonismo

Esta entrada fue modificada por última vez el 27 de enero de 2025 a las 3:28 PM