Real Madrid entrega el liderato de la Liga al Barcelona

Dudas. Muchas dudas. Este es el estado actual del Real Madrid después de verse muy cerca del título de Liga hace unas semanas cuando era líder con dos partidos más. En el Bernabéu solo pudieron empatar 3-3 contra Las Palmas en uno de sus peores partidos de la temporada.

 

 

Después de 16 jornadas se ven segundos por detrás del Barcelona y muy presionado por el Sevilla con solo un partido aplazado. El mal juego de Valencia y de 70 minutos en Villarreal se ha repetido y los blancos se quedaron de nuevo sin tiempo para la enésima remontada.

Zidane hizo hasta cuatro cambios respecto al partido en Villarreal con las merecidas entradas en el once de Morata e Isco además de Kovacic y Bale. Enfrente se encontró a un equipo muy atrevido, que siempre quiso el balón se lo quitó de principio a fin a los blancos y que mereció la victoria. Volvieron los pitos al Bernabéu después de mucho tiempo centrados en Keylor Navas y Bale fue el claro ejemplo de la frustación al marcharse expulsado por una acción contra Viera.

Roque Mesa, Vicente Gómez; Viera y Tana se juntaban una y otra vez en la salida del balón y hacían a los jugadores del Real Madrid correr detrás del balón. Los blancos se desesperaban por momentos y sin Casemito nadie robaba. Era entonces cuando los de Setién encontraban el espacio para buscar a Jesé o Boateng. El plan le salía bien, aunque pronto llegó el primer gol local.

Kovacic encontró un hueco tremendo entre los centrales y puso un balón perfecto a Isco, que superó con facilidad a Javi Varas. No cambiaron el gesto los canarios, que justo tras el saque inicial igualaron el partido con un golazo de Tana. El centrocampista hizo un reverso perfecto ante Ramos y batió a Keylor Navas con un potente disparo.

Solo iban 10 minutos de un partido de ida y vuelta, con dominio amarillo y la siempre latente amenaza del Real Madrid. El balón y las ocasiones eran para los visitantes y primero Jesé y después Boateng no acertaron a hacer el segundo. Ni rastro de Cristiano y Bale en el partido y con Benzema en el banquillo, Morata no era suficiente.

Lo mejor al descanso para el Real Madrid era el resultado. Y la segunda mitad evidenció el mal partido de los blancos, que escucharon los pitos de su público ante el recital de fútbol de Las Palmas. Gran parte de culpa de ello la tuvo Bale, que se autoexpulsó a los 47 minutos de juego con una patada y un empujón a Viera sin venir a cuento.

El equipo canario siguió fiel a su plan y comenzó a disfrutar cada vez de más espacios. En una de las jugadas en el área rival, Ramos cometió un claro penalti con las manos al taponar de forma innecesaria un disparo de David Simón. Jonathan Viera no falló desde los once metros y obligaba al Real Madrid a tirar de épica.

Con un gol por debajo en el marcador y un jugador menos, todavía se le puso peor a los blancos cuando Boateng aprovechó otro despiste defensivo para regatear a Keylor fuera del área y marcar el 1-3 a placer. El Real Madrid estaba en la lona y no daba síntomas de levantarse. Pero se levantó.

Zidane dio entrada a James y a Benzema para dar algo de aire fresco al ataque y aunque no tuvo mucho efecto en el juego, el Real Madrid terminó empatando con dos goles de Cristiano en el 89 y en el 89. Ningún equipo es capaz de lograr lo que logran los blancos. Primero marcó el portugués de penalti y después con un cabezazo para salvar al menos un punto, aunque el liderato es azulgranas 16 jornadas después.

 

FUENTE: https://goo.gl/zIz9m4

Esta entrada fue modificada por última vez el 1 de marzo de 2017 a las 5:18 PM