Históricamente el cacao es una fruta que ha sido de gran importancia en el país, razón por la cual muchos campesinos del Triángulo Minero, se dedican a esa producción, actividad agrícola que cuenta con el apoyo del Gobierno Sandinista a través del Ministerio de Economía Familiar, Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (MEFCCA) desde donde se impulsa el Programa ProCacao.
Actualmente son diez las cooperativas de producción de cacao que se han establecido en el Caribe Norte.
Una de ellas la Cooperativa Campesina Copesiuna, ubicada en la comunidad El Hormiguero, en el municipio de Siuna, integrada por 81 miembros, que se dedican a la producción y copio de grano en la variedad de trinitario por semilla híbrida.
Justino Armas, uno de los miembros de Pro Cacao, trabaja junto a su familia las cinco manzanas destinadas para dicho rubro, de las cuales obtiene una producción de 120 quintales anuales, lo que le permite obtener un ingreso económico considerable para sustentar su hogar.
“El cacao es un producto que requiere de mucho trabajo, un producto muy hermoso, diferente de los granos básicos, me inicié con media manzana y sin experiencia alguna trabajaba de manera empírica y tradicional, sin embargo, gracias al respaldo del Gobierno ya tenemos cinco manzanas dedicadas a este trabajo, el cual me genera satisfacción, amor y orgullo porque he logrado salir adelante”, dijo.
Desde 2014 el Gobierno impulsa en el Caribe Norte el Programa Pro Cacao, que brinda a los productores asistencia técnica, financiamiento para el mantenimiento de las parcelas; creación y mejoramiento de acopios y la anexión del valor agregado a la semilla.
“Mi meta es llegar a producir más de 120 quintales de cacao y sé que lo voy a lograr porque ahora estamos trabajando mejor, utilizando estrategias de trabajo. ProCacao nos ha inmerso en la utilización de injertos de cacao con niveles altamente productivos y vamos encaminados en lograr la calidad de producción y así incursionar en otros mercados. Hemos aprendido a compaginar los conocimientos técnicos con nuestras prácticas ancestrales y la verdad es que los resultados están siendo positivos”, señaló.
Además de la labor de siembra y cultivo de cacao, Olga Armas, hija de Justino, se ha dedicado a la elaboración de chocolates de manera artesanal, a la fecha únicamente fabrica la cantidad necesaria para el consumo domiciliar, sin embargo, pretende adquirir mayores conocimientos para establecer su propia chocolatería.
“Con un poco de curiosidad y algunos conocimientos adquiridos he logrado establecer mi receta de chocolate, aquí no utilizamos máquinas especializadas, sino de manera artesanal los hago, producir cacao y verlo hecho chocolate es una experiencia muy bonita, porque te das cuenta de los incontables beneficios de esta planta y sus frutos”, refirió.
Asímismo, doña María Ángeles Estrada, destaca que el cacao abona al crecimiento económico familiar, muestra de ello es que son parte activa de la actividad productiva de su pequeña comunidad.
“La producción de cacao ha venido a cambiar la vida de nuestras familias, requiere de mucho esfuerzo y poco a poco vamos saliendo adelante. El cacao tiene como 12 años de estar en la comunidad pero desde hace unos cuatro años el Gobierno ha venido a darnos un gran impulso y es por eso que todos nos estamos involucrando y a largo plazo esperamos diversificar el rubro y aumentar los niveles de producción”, expresó.
Pro Cacao apunta al mejoramiento de capacidades productivas
El Gobierno en aras de hacer un mejor uso de los recursos naturales en el Caribe Norte y potencializar a los pequeños productores de cacao, creó el Programa ProCacao, que ha venido a mejorar significativamente la vida de mil 200 protagonistas, quienes han sido capacitados y han contado con un respaldo financiero.
El compañero Rodrigo Larrave, Delegado del Mefcca en el Caribe Norte, refiere que en el Triángulo Minero (Rosita, Bonaza y Siuna), se ha logrado el establecimiento de diez cooperativas cacaoteras y 107 grupos solidarios, los cuales acceden a créditos solidarios para el fomento y el mantenimiento de los cultivos.
“Apoyamos a productores que tienen cacao en cosecha, alcanzando un promedio de 700 nuevas manzanas, de manera que hemos llegado a fortalecer las capacidades a través del acompañamiento, capacitación y mejoramiento de tecnología, estableciendo clones de alta productividad. Nuestras cooperativas producen el cacao, lo acopian y comercializan con un precio de primera calidad, siendo destinado a la exportación”, señaló.
Así mismo, Larrave destaca que las cooperativas de cacao han venido a dar una mejor oportunidad de desarrollo a las familias, ya que hoy están obteniendo el reconocimiento a su labor agrícola.
“Los sistemas agroforestales son ancestrales en nuestra población y el cacao es un rubro que nos está sirviendo para incrementar los ingresos de las familias y la implementación de fincas con sistemas agroforestales tomando en cuenta que el cacao nos permite manejar de manera racional los recursos naturales”, subrayó.
Fuente: El 19 Digital
Esta entrada fue modificada por última vez el 14 de enero de 2018 a las 9:57 AM