Tras 8 años en los que Nicaragua ha mantenido un crecimiento económico sostenido arriba del 4% y que se ha consolidado como una de las economías más dinámicas de Latinoamérica, la ola de desestabilización emprendida desde abril pasado por sectores de derecha, está generando impactos negativos en la economía del país.
Según el informe del Presidente del Banco Central de Nicaragua (BCN) Ovidio Reyes, en la Mesa de Diálogo Nacional, las expectativas de crecimiento económico para este año ya cambiaron.
“Después que esperábamos un crecimiento entre el 4.5 y 5.0 por ciento, nuestra nueva estimación es apenas de 3.0 y 3.5 por ciento. Y lo más duro y lamentable de esto, es la generación de empleos. Nosotros estamos esperando que se pierdan 58,300 nuevos empleos como resultado de la menor dinámica económica”, detalló Reyes.
Lo cierto es que luego de 8 años de estabilidad, gracias al Modelo de Diálogo, Alianza y Consenso, en los que la meta del país era crecer cada vez más, las manifestaciones violentas y los tranques que se mantienen en todo el territorio ya tienen repercusiones económicas serias.
En solo un mes de asedio y desestabilización se han perdido 258.9 millones de dólares y entre los sectores más afectados están el hotelero, restaurantes, sector comercial y de servicios.
En el sector productivo, aunque las actividades primarias, agrícolas y pecuarias, están por comenzar su ciclo, también se prevé una desaceleración en sus tasas de crecimiento por la imposibilidad de comercializar la producción.
Mayor presión sobre el sector turismo
La industria turística nicaragüense es uno de los sectores de mayor crecimiento económico y generación de empleos.
Sin embargo, con la desestabilización emprendida desde abril, se calcula una pérdida inicial de 185 millones de dólares.
“Entonces, estos son efectos que van a ir teniendo impactos acumulativos en el tiempo. Estos 185 millones de dólares de pérdidas de turismo van a continuar creciendo”, aseguró Reyes ante los miembros de la Mesa de Diálogo Nacional.
En este golpe a la economía nicaragüense también se suma las perdidas en la inversión extranjera directa que se calcula en 157 millones de dólares menos, mientras que en las exportaciones el impacto para este año se estima en 270 millones de dólares menos.
“Como les acabo de mencionar, todos estos son grandes números, no son números pequeños. Son números que van a tener un impacto en las ventas, en los negocios, en las pérdidas de empleos. En las pérdidas de negocios todavía no tenemos las estadísticas, pero ya hay negocios cerrados, ya hay pequeños y medianos negocios que no están operando”, afirmó Reyes.
Para el presidente del BCN, una de las primeras acciones que deben prevalecer en el Diálogo Nacional es “recuperar la estabilidad para que la economía vuelva a fluir”.
“La tregua dio gran alivio, como lo están mencionando aquí los agricultores, las pequeñas y medianas empresas. Y creemos que este alivio debe ser extensivo, tenemos que mantenerlo para minimizar los costos que ya son costos reales y que podrían profundizarse en detrimento de la familia nicaragüense”, sostuvo Reyes.
Fuente: El 19 Digital
Esta entrada fue modificada por última vez el 28 de septiembre de 2022 a las 12:52 PM