El Barcelona se ha proclamado campeón de Liga en Riazor a falta de cuatro partidos por disputar todavía lo que supone el octavo doblete a lo largo d su historia. El equipo de Valverde ha confirmado este domingo su indiscutible superioridad en esta competición que la ha dominado de principio a fin. Nadie ha sido capaz de discutir la superioridad culé. El Real Madrid dimitió de la Liga a las primeras de cambio tras un comienzo desolador, allanando considerablemente el camino de su gran rival.
El Valencia empezó muy fuerte siguiendo la estela de los azulgranas, pero fue perdiendo fuelle con el transcurso de las jornadas y distanciándose de manera gradual. El Atlético de Madrid ha sido el que más ha aguantado el fortísimo ritmo azulgrana, aunque siempre de lejos. Aprovechó un momento de flaqueza del equipo de Valverde para ponerse a cinco puntos después de los empates inesperados con rivales de menor entidad como Espanyol, Getafe y Las Palmas en un espacio de cinco jornadas. El inmediato triunfo del Barcelona frente al Atlético en el duelo directo del Camp Nou dejó sentenciada la Liga.
Este título representa la solidez que ha hecho gala el equipo de Valverde desde el primer momento. El Txingurri no tenía una labor fácil en este su primer año. Y más cuando se encontró en la línea de salida con que Neymar se iba del club, el Madrid le ganaba la Supercopa con enorme facilidad y los refuerzos ansiados en el mercado estival no llegaban.
Los cambios del Txingurri
El técnico tiró de lo que tenía y convirtió un equipo desbocado en ataque en un conjunto más organizado, con las líneas más juntas y que recuperó con enorme efectividad la presión de otros años. Una vez sentadas las bases de lo que tenía que ser el ‘modus operandi’ de su nuevo Barça, todo fue más fácil.
A partir de aquí comenzó a aparecer el elenco de excelentes solistas que habita en Can Barça. Messi fue el director de la orquesta una vez más. Líder en goles y asistencias, Leo ha vuelto a dar una nueva lección de lo que es capaz de hacer. Suárez, que comenzó muy lejos de su mejor forma, se convirtió con el paso de los partidos en el mejor aliado de Leo a la hora de marcar. Una pareja demoledora.
Futbolistas como Iniesta, Rakitic, Alba, Piqué, Busquets o Umtiti, han sido los otros artífices del título liguero. Todos ellos han cuajado una temporada sobresaliente. Incluso Umtiti, que en los últimas semanas anduvo despistado por el tema de su renovación y tuvo alguna laguna defensiva.
Hay que hacer mención especial a Ter Stegen que camina hacia el trofeo Zamora como el portero menos goleado. La defensa es labor de todo el equipo, pero el alemán ha aparecido en momentos claves de los partidos evitando en varias ocasiones que el rival se adelantara el marcador. Sin Ter Stegen nada habría sido igual.
Y al final los números cantan. Ganar a falta de cuatro partidos supone una superioridad total que se ha basado en dos aspectos. Uno es que el equipo no ha perdido un partido en toda la temporada y va camino de acabarla sin hacerlo. Un nuevo reto que queda abierto. Y el otro es la fortaleza que ha mostrado el equipo en los partidos claves. Mención especial para el triunfo en el Bernabéu, las victorias antes Valencia y Atlético en el Camp Nou y el empate lejos de casa ante estos dos equipos, en ambos casos remontando un resultado adverso.
Octavo doblete
El título supone el octavo doblete a lo largo de su historia. Los tres primeros los ganó en la década de los cincuenta y huo que esperar 30 años a que Van Gaal consiguiera el cuarto en 1998. Guardiola logró el siguiente en 2009, un doblete que acabaría convirtíendose en triplete al conseguir también la Champions. Exactamente lo mismo que en el primer año de Luis Enrique en 2015. El asturiano ganaría otro el año siguiente y ahora el último de Valverde.
Fuente: marca.com
Esta entrada fue modificada por última vez el 28 de septiembre de 2022 a las 1:09 PM
