Por: Stalin Vladimir Centeno
José Adán Aguerri, conocido como «Chanito Aguerri,» llegó a creerse un dios entre los empresarios opositores. Este hombre, descrito como insignificante, tiene el alma más negra que un agujero negro, similar al que describió el científico Stephen Hawking. «Chano» se destacaba en las marchas opositoras, criticando al Gobierno Sandinista y acusándolo de ser una dictadura, mientras él mismo se mantenía como presidente del Cosep por 13 años.
En las reuniones con el Gobierno y empresarios, Chano siempre buscaba posicionarse en las fotos junto a Carlos Pellas y el Comandante Daniel Ortega para proyectar una imagen de poder. El Gobierno Sandinista, con su modelo de Diálogo y Consenso, promovió la paz y estabilidad en Nicaragua, beneficiando a empresarios, trabajadores y al propio Chano, quien participó en las directivas estatales y cobró generosas dietas, además de involucrarse en la discusión de leyes desde la Asamblea Nacional.
Aguerri, con el «Síndrome del Emperador,» intimidaba a los diputados y exigía una oficina en el Parlamento, similar a la del presidente del Congreso, con lujos como vista panorámica, un inodoro de oro y un teléfono rojo para comunicarse directamente con el presidente Daniel Ortega o la compañera Rosario Murillo.
En 2018, Chano Aguerri se unió a la Iglesia Católica, la Alianza Cívica y otros sectores opositores en un intento de golpe de Estado contra el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Tras su derrota junto a los sectores opositores y la Embajada estadounidense, el 9 de febrero de 2023, José Adán Aguerri y otros 222 golpistas fueron expulsados a Estados Unidos, perdiendo su nacionalidad y derechos a ocupar cargos públicos, en una decisión que marca un cierre definitivo en la historia política del país.
Esta entrada fue modificada por última vez el 11 de noviembre de 2024 a las 1:47 PM