Mensaje del Presidente-Comandante Daniel en el Acto Solemne en Homenaje al Padre Miguel D´Escoto Brockmann, Canciller de la Dignidad. 9 de Junio del 2017:
Herman@s nicaragüenses, este día, con las lluvias que traen la Vida, le decimos a Miguel, nuestro Hermano, que él, como la lluvia, ha sido Sembrador de Vida. Lo sabe muy bien parte de su Familia que aquí nos acompaña, y la otra parte de la Familia que se encuentra en Tierras lejanas, pero que están presentes también en esta tarde… En esta tarde en la que, a quien llamamos con toda Justicia, el Canciller de la Dignidad, de la Dignidad de Nicaragua, y desde esa posición, Defensor de la Dignidad de los Pueblos de Nuestramérica, y de los Pueblos del Mundo.
Sembrador de Vida, Miguel, en Chile, con las Familias más humildes, con las Familias más pobres ahí, practicando el Evangelio.
Sembrador de Vida aquí en Nicaragua también en momentos de dolor, de tragedia. Cuando el Terremoto sacudió a Nicaragua, ahí estuvo Miguel, inmediatamente, sembrando Esperanza, y por lo tanto, Vida.
Sembrador de Vida, en tanto multiplicador del Ideal y del Principio Cristiano de la Justicia. Y lo hizo allá en Estados Unidos desde la Orden Maryknoll, y luego lo hizo viajando a Regiones empobrecidas de diferentes Continentes, incluyendo el Continente africano. Y ahí se fue vinculando Miguel con el Pensamiento de Líderes de Países en Vías de Desarrollo, de Países que luchaban por la Independencia, que luchaban contra el Colonialismo; Líderes como Julius Nyerere, ese gran Líder africano de raíces cristianas, igual que Miguel.
Encontrándose con sus Ideas con Líderes de los diferentes Continentes, y también de los Países Desarrollados, en donde desde Sacerdotes, Religiosos, Laicos, Intelectuales, se encontraban con el Pensamiento de Miguel, y el Pensamiento de Miguel se encontraba con el Pensamiento de esa Comunidad de Hombres y Mujeres que han estado y siguen luchando por la Paz en nuestro Planeta… ¡Paz con Justicia!
Toda esa Riqueza Cultural que él venía acumulando la entregó de lleno a la Lucha del Frente Sandinista; y luego ya como Canciller defendiendo a este Pueblo, contribuyó para que Nicaragua se vinculara aún más con todos esos Pueblos, y que pudiese figurar en mejores condiciones la Lucha por la Paz, frente a la agresión que sufría nuestro Pueblo. Y encontrándose al final del Camino en ese tramo de la Historia de nuestra Patria, encontrándose con el Cardenal Miguel.
Miguel era Canciller cuando al Cardenal Miguel le pedimos que fuese el Presidente de la Comisión de Reconciliación y Paz de Nicaragua, y el Cardenal Miguel inmediatamente asumió ese enorme reto como Defensor de la Paz, y Constructor de la Paz en Nicaragua.
Todos conocemos el Amor al Arte, a la Cultura, de Miguel, y quiero compartir los Sentimientos de l@s Artesan@s de nuestro País, de l@s Artistas de nuestro País, en los cuales promovió siempre el que tuviesen la posibilidad, no solamente de dar vida a la arcilla, dar vida al barro, sino que también pudiesen llevarse esas Obras de Arte, en recorridos por nuestro País, y en recorridos hacia otros Países.
Fue un Promotor de la Cultura, Miguel, y cuánto le reconocen ese Esfuerzo, ese Compromiso, l@s Artistas y Artesan@s sobre todo de nuestro País; los Pintores, Escultores de nuestro País. Ahí siempre con ellos, ¡en un Acompañamiento total, en un Compromiso total! Y firme siempre en sus Ideas, inclaudicable siempre en sus Ideas, y promoviendo, como bien lo hizo.
Cuando al retomar el Gobierno en el Año 2007, luego Nicaragua promovió la Candidatura de Miguel para Presidente de la Asamblea General de Naciones Unidas, bueno, inmediatamente vino el respaldo de todos los Países en Vías de Desarrollo, que lo conocían muy bien, que conocían de sus Ideas, de sus Principios, de su Práctica. El Movimiento No Alineado inmediatamente le dio todo su respaldo, y con ello, lógicamente, América Latina y el Caribe.
Y allá dando la Batalla en Naciones Unidas, donde hoy más que nunca está claro que hace falta una re-fundación de Naciones Unidas. Para que Naciones Unidas, ya en un nuevo contexto, en un nuevo tipo de Organización, en donde todos los Países tengamos iguales Deberes e iguales Derechos, seamos todos los que podamos realmente asegurar la Paz que tanto demandan los Pueblos del Mundo.
Él levantó esa Bandera con una gran Fuerza, con una gran Convicción, y el Testimonio de él está escrito; sus Ideas, sus Propuestas están escritas, y están acompañadas de su Práctica. Hasta el último momento Miguel estaba convencido de que esa es una Batalla que tenemos que seguir librando.
Y es un Tema que está presente en Naciones Unidas, y es una preocupación que está presente en Naciones Unidas, y cada día se suman más Países abiertamente a cuestionar la estructura antidemocrática que tiene Naciones Unidas. Estoy seguro que llegará el día en que ese Proyecto de Miguel, esa Iniciativa de Miguel, ese Sueño de Miguel, también se hará realidad.
¡Cuántas vivencias con Miguel! ¡Cuántos lugares recorrimos! Recuerdo cuando fuimos al Acto de Independencia de Zimbabue. Fuimos allá, Miguel, Rosario, Lumberto Campbell, esa era la Delegación de Nicaragua; éramos cuatro. Veníamos de una Revolución profunda como la nuestra, y una Victoria Gloriosa como la que alcanzó nuestro Pueblo en el Año 1979, y fuimos allá a conocer una experiencia totalmente diferente.
Había una Lucha ahí Revolucionaria Armada como la nuestra, había dos Movimientos Revolucionarios Armados en razón del peso tribal: Los Shona por un lado, y los Ndebele por otro lado… ¡dos grandes agrupamientos tribales allá en Zimbabue! Donde en esos Tiempos pesaba aún más el tribalismo, pero dos Agrupamientos Revolucionarios, uno encabezado por Mugabe y otro encabezado por Nkomo.
Y Miguel que era de empuje, recuerdo que cuando nos vamos acercando al lugar donde nos iban a recibir, para luego ir a un Estadio donde se iba a dar el Acto de Independencia, la Ceremonia de Independencia, entonces el vehículo se parquea, Miguel se baja inmediatamente, y empieza a decir, a hablar ahí… “Ahí viene”, decían, “ahí viene”, entonces abrieron espacio, creían que venía el Príncipe de Inglaterra. Abrieron espacio, y ahí entramos nosotr@s hasta los Salones, donde luego nos encontramos con el Príncipe de Inglaterra.
Era aquello para nosotr@s bastante extraño, porque como que no entendíamos muy bien ese Proceso. Ahí fue donde empezamos a aprender que era necesario entender que cada Proceso Revolucionario tiene sus propias particularidades, tiene sus propias características. Porque decíamos: Bueno, ¿qué viene a hacer aquí el Príncipe de Inglaterra en representación de Su Majestad, si la Independencia es de este Pueblo? Bueno, fue invitado, seguro, porque como ellos habían sido la Fuerza dominante, la Fuerza colonizadora, dijimos: Fue invitado.
Todavía no estábamos claros de lo que íbamos a ver después, y entramos al Estadio de noche, serían las 7 de la noche, 8 de la noche allá en Zimbabue, entramos al Estadio, y en el Estadio había una multitud en las gradas. ¡La negritud completa en las gradas! Los Shona y los Ndebele estaban ahí, las negritudes, que tanto habían luchado por su Independencia.
Luego se va presentando una formación militar en el centro del Estadio, y todo esto nosotr@s le preguntábamos a un Compañero Revolucionario que era nuestro guía, nuestro acompañante: ¿Y ahora qué hacen allí estos? Y nos iba explicando, y a él mismo le costaba entender y aceptar lo que estaba pasando.
Porque en la formación militar el primer Bloque Militar y el Jefe del Destacamento Militar, que por lo tanto era el Jefe del Ejército ya en ese Zimbabue Independiente, o iba a serlo en el momento en que se diese ya el Grito de Independencia como resultado de Negociaciones, era el Jefe de las Fuerzas Colonialistas que perseguía y disparaba contra los dueños de esas Tierras, los dueños de esas Riquezas. Ahí estaba el Primer Bloque, la Fuerza Colonialista.
Segundo Bloque, era un Bloque de Guerriller@s del Destacamento de Mugabe; y el otro Bloque, otro Destacamento de blancos. O sea, un primer Destacamento de blancos rodesianos, luego otro Destacamento de negros del Movimiento encabezado por Mugabe; luego otro Destacamento de blancos, y luego el otro Destacamento de negros del Movimiento encabezado por Nkomo, el otro Dirigente Guerrillero. Fíjense, para nosotr@s estar viendo eso nos costaba entenderlo.
Luego, suenan las pitoretas y aparecen las caballerías recorriendo el Estadio, y luego el Príncipe entrando al Estadio, saludando. Y finalmente, el momento de la Independencia, en esas condiciones; fueron los Acuerdos a los que llegaron para ponerle fin a la guerra, haciéndoles concesiones duras como esa, en el aspecto militar, a las Fuerzas Colonialistas; pero por otro lado significaba ya la Independencia para ese Pueblo, que era el gran objetivo que ellos tenían.
Luego se empieza, ahí estaba en el Estadio ondeando la Bandera británica, y ya cuando empieza la Ceremonia de Independencia, ya el momento de la Independencia, empieza a arriarse la Bandera británica… Va para abajo, va para abajo, y al otro lado empieza a izarse la Bandera de Zimbabue, la Bandera de Zimbabue. Entonces ahí sí explotó ese Estadio, y las graderías se llenaron de luz.
Y ahí estábamos con Miguel viviendo esa experiencia que quedó grabada para siempre, y nunca dejamos de comentar esa experiencia, en donde un Pueblo en África, al igual que el Pueblo de Nicaragua que había luchado contra la Política imperialista, allá contra la Política Colonialista, Imperialista, también alcanzaba su Liberación, pero con determinadas condiciones, que no eran exactamente las nuestras.
Y cuántos momentos de la Historia en nuestro Planeta, en esta Lucha por la Paz, por la Justicia, por la Soberanía, por la Libertad, ahí con Miguel en diferentes Foros Internacionales.
Y luego, ¡la gran Batalla de Nicaragua ! Yo diría que, si bien es cierto, la Victoria Revolucionaria del 79 fue una Victoria extraordinaria, histórica, en el Campo Internacional Nicaragua alcanzó una Victoria, sin precedentes. Porque cuando estaba la guerra impuesta por los Gobernantes norteamericanos, el minado de los Puertos, el asesinato de Maestr@s, el asesinato de Médic@s, el asesinato de Trabajador@s de la Construcción cuando construían Carreteras y Caminos… Cuando estaba esa guerra terrible, donde nos ponían a pelear Hermanos contra Hermanos, financiada, organizada y entrenada por los Gobernantes norteamericanos, que no dudaron incluso en recurrir al Narcotráfico para garantizarles los fondos a esas operaciones terroristas.
Recuerdo aquel momento en que reunidos con Miguel, él empezó a plantear que llevásemos a los Estados Unidos a la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Bueno, yo le escuchaba con mucha atención, algunos Compañeros presentes, que hoy están ausentes, de la Lucha, eran pesimistas, y decían: “Eso no tiene sentido”. Y me decían aparte: “Esa es locura de Miguel”; pero yo le dije a Miguel: ¡Vamos adelante! ¡Claro que vamos adelante, a dar esa Batalla! Y fuimos adelante a dar la Batalla a la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Recuerdo que, incluso, Gobiernos Amigos nuestros eran escépticos. Y tenían razón. ¿Quién le podría ganar la Batalla Jurídico-Legal al Imperio en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, menos un “paisecito”, como nos han visto y nos califican los Imperios: Un “paisecito”, un “paisecito bananero”, que estaba luchando por su Dignidad, su Soberanía, y por la Paz, y porque terminara el derramamiento de sangre.
Y fuimos a la Corte, acompañados de Expertos, Abogados como Carlos Argüello, Abogados norteamericanos como Paul Reichler, Amigo de Nicaragua que también ayudó en el Proceso de Paz. Ese fue un Equipo de Abogados, y fuimos a dar la Batalla a la Corte. Y Miguel siempre con ese entusiasmo empujando cuando escuchaba criterios pesimistas.
Y al final, la Sentencia. Y al final, por primera vez en la Historia era condenado un Estado, una Potencia; la mayor Potencia del Planeta era condenada por actos de terrorismo en contra de Nicaragua, por acciones criminales en contra de Nicaragua.
¡Ahí está la Sentencia de la Corte! ¡Es una Sentencia que está viva, una Sentencia que está viva! Si entonces Estados Unidos le debía a Nicaragua más de 17,000 millones de dólares por los daños causados a este País, pues ahora eso seguramente está cuadruplicado o quintuplicado. ¡La Sentencia está viva!
Por eso es que yo insisto en señalar que los Fondos que Estados Unidos ha colocado en nuestro País, que empezó a colocar en nuestro País a través de diferentes Organismos a partir del año 1990, y que luego vino recortando a partir del año 2008, ya quedó reducido a cero todo eso que ellos llaman “Cooperación” o “Ayuda”, no es ninguna Ayuda, no es ninguna Cooperación; simplemente, eso lo tenemos que ir colocando en una cuenta como parte de la deuda que Estados Unidos tiene con Nicaragua.
En todo caso, eso son centavos que ellos han abonado a la deuda que todavía tienen con Nicaragua. No es un asunto de capricho. Es un asunto de Justicia y de Respeto al Derecho Internacional, y de Respeto a los Organismos de Naciones Unidas, y de Respeto a la Corte Internacional de Justicia.
Miguel estaba convencido de que esta Batalla teníamos que seguirla librando, y tenemos que seguirla librando, hasta el día, como ya lo he dicho y lo seguiré repitiendo, hasta el día en que encontremos un Congreso norteamericano que recuerde que le están debiendo a Nicaragua, y que la Sentencia está allá, viva, dictada por la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Eso es, diría yo, la mayor Victoria en el Campo Internacional que Nicaragua alcanzó en esos momentos duros. Y el hombre que dio lugar a esa Iniciativa, a esa Idea, está aquí con nosotr@s, con su Fuerza, con su Fortaleza, con su Moral, con sus Convicciones, con su Firmeza. Él fue el que promovió, el que presentó la Propuesta, y yo le dije: ¡Vamos adelante! ¡Claro que vamos Adelante! Aun cuando otr@s, yo veía claramente que pensaban que era una acción totalmente descabellada.
Y Miguel nos seguirá acompañando, porque sus Ideas, su Luz no se apaga con este Tránsito. Nos deja físicamente, pero nos acompaña y nos seguirá acompañando en la Batalla diaria que seguiremos librando, por la Justicia, por la Libertad, por la Soberanía, por la Paz, de nuestros Pueblos.
A Miguel le decimos que aquí estamos, y que aquí está toda Nicaragua, que aquí está todo este Pueblo, comprometido a darle continuidad a la Lucha por esos Ideales y por esos Principios, de Raíces profundamente Cristianas. Y por eso es que, nosotr@s de forma segura hemos plasmado en nuestra Constitución esos Principios, Cristianos, Socialistas y Solidarios, que son los que nos han permitido venir construyendo la Paz y la Estabilidad en nuestro País.
Y, la Juventud nicaragüense, que acompaña y ha acompañado a Miguel todos estos años, y que sigue acompañándolo en estas nuevas generaciones, estamos seguros que esa Juventud ya está apropiada del Pensamiento, de las Ideas, de las Convicciones, y de la Firmeza de nuestro Querido Hermano, el Canciller de la Dignidad y de la Paz, Miguel D´Escoto Brockmann.
Y le decimos, como le hemos dicho a los Héroes y Mártires, y que se resume en aquel Saludo al Che: ¡Hasta Siempre, Padre Miguel! ¡Hasta Siempre!
Esta entrada fue modificada por última vez el 12 de junio de 2017 a las 5:20 PM