La Comunidad Cristiana San Pablo Apóstol informó este miércoles que entregó al Nuncio del Vaticano en Nicaragua, Stanislaw Waldemar Sommertag, una carta con el respaldo de 284 mil firmas, para denunciar las actitudes de Silvio Báez que han promovido crímenes, destrucción, violencia, muerte y caos en el país.
Desde la Capilla Concepción de María, Thomas Valdez, expresó que la carta dirigida al Santo Padre con las firmas del pueblo cristiano y católico de todo el país, fue entregada esta mañana en una reunión se sostuvieron con el nuncio apostólico y el secretario de la Nunciatura.
En el documento, la feligresía nicaragüense pide con todo el respeto y cariño que Dios otorgue sabiduría, para tomar las mejores decisiones sobre el caso del obispo Silvio Báez, cuya labor instigadora de violencia y desunión, no corresponde con las tareas pastorales, propias de su investidura o del mandato papal para las autoridades eclesiales.
Valdez dio lectura a la carta, que pide al Papa Francisco que por el bien de todos y todas, que Monseñor Silvio Báez reciba otras tareas que realizar.
“Pedimos que Báez salga a cumplir otras misiones y que seamos capaces los nicaragüenses de entendernos, sin que un obispo aliente y promueva sanciones económicas de las potencias contra Nicaragua, división política y conflictos sociales, así como odio y resentimientos improcedentes e incorrectos para la mayoría de nicaragüenses”.
“Monseñor Báez debe dejar de involucrarse en el afán de continuidad de un golpismo perverso, que pretende imponer a empresarios y acaudalados que son minorías, agrupados con abortistas, feministas, narcotraficantes y delincuentes; como el mismo dice, que se implantaría sobre la mayoría pobre y luchadora, que en Nicaragua han encontrado y encuentran en este modelo cristiano, humanamente imperfecto, pero mejorable, aliento y respaldo, para los afanes de trabajo, justicia social, paz y bienestar”.
“Santo Padre, Papa Francisco, desde Nicaragua, cuna de Darío y escenario de luchas y martirios del valiente obispo Antonio de Valdivieso, cuna de tanta fortaleza espiritual, nos presentamos a usted, pidiendo de todo corazón que nos entienda y nos ayude a avanzar en la reconciliación y la paz, desde la familia y comunidades de nuestro país”.
El documento también reitera que “con las propuestas de política para una cultura de reconciliación y paz, queremos generar encuentros y afianzar valores de armonía y convivencia, trabajando desde las escuelas, centros de salud, comunidades, la familia y todas las entidades públicas y privadas que podamos sumarnos a la restauración del alma buena, de los y las nicaragüenses”.
“Desde la fe, esperamos en Dios sus decisiones, con la esperanza de continuar con su bendición, trabajando por la paz y el cariño, que hemos venido afirmando todos estos años con la familia nicaragüense y como familia cristiana de mucha fe, tradición y fortaleza espiritual, cristiana y solidaria”.
Al concluir, la carta señala que rezan por el Santo Padre, por Nicaragua y a nuestra madre María, para que derramen bendición, trabajo y justicia social en esta Nicaragua, bendita, unida y siempre libre.
A continuación carta dirigida al Santo Padre:
Managua, 24 de Octubre, 2018
Día de San Rafael Arcángel
Su Santidad
Papa Francisco
El Vaticano
Roma
“Nada hay encubierto, que no haya de descubrirse; ni oculto, que no haya de saberse. Por tanto, todo lo que habéis dicho en tinieblas, a la luz se oirá; y lo que habéis hablado en los aposentos, se proclamará en las azoteas.”
(Lucas, 12:2-3).
Santidad :
Las Comunidades Católicas y el Pueblo Católico de Nicaragua le escribimos con todo el Respeto, Consideración y Cariño que le tenemos, para clamar, como Pueblo de Dios, pidiéndole a Él, otorgue a Usted Sabiduría para tomar las mejores decisiones respecto al Obispo Silvio Báez, cuya labor instigadora de violencia y desunión, no corresponde con las Tareas Pastorales propias de su investidura, o del Mandato Papal para las Autoridades Eclesiales.
És bien sabido, en Nicaragua y el Mundo, que el Obispo Silvio Báez ha sido promotor, instigador y generador de violencia y conflictos inadmisibles entre Herman@s. És bien sabido que el Obispo Báez, a través de sus mensajes, tuits y actividad política, ha promovido y promueve las acciones que oponen a las Familias nicaragüenses, unas contra otras. El Obispo Báez alentó los extremos conocidos, en Abril, Mayo y Junio, cuando en el País se vivió, con los Tranques de la Muerte, un Secuestro Nacional. En esos meses de “tranque” centenares de Herman@s fueron secuestrad@s, torturad@s, asesinad@s, desaparecid@s, así como también fueron destruidos Bienes Públicos y Privados, destruida la Economía Nacional, que venía tan bien, todo lo cual fue celebrado cotidianamente por el Obispo Báez en sus insólitos textos alentadores de odio, violencia, crímenes, destrucción y caos.
Como Pueblo ofendido, agraviado y amenazado constantemente por la labor malévola e impropia de Monseñor Silvio Báez, cuyos frutos son bien conocidos dentro y fuera del País, pedimos a Dios y al Espíritu Santo, iluminen Sus Reflexiones, Santo Padre, para que la Iglesia y las Comunidades Cristianas de nuestra Nicaragua, recuperemos Armonía, Tranquilidad y Feligresía que pueda confiar en sus Pastores, y ser animada por ellos para caminar construyendo Paz y Armonía.
Ya estamos llegando a Fin de Año, a las Celebraciones de la Inmaculada Concepción de María, Nuestra Purísima, y a todos los Eventos que nos convocan a la Paz y la Buena Voluntad; queremos, por lo tanto, pedir a Usted, como Jefe de la Iglesia Católica, y por el Bien de Tod@s, que Monseñor Silvio Báez tenga otras ocupaciones; que salga a cumplir otras Misiones, y que seamos capaces l@s nicaragüenses de entendernos sin que un Obispo aliente y promueva Sanciones Económicas de las Potencias contra Nicaragua, división política, conflictos sociales y políticos, así como odio y resentimiento improcedente y chocante, extraño e incorrecto para las Mayorías nicaragüenses.
Monseñor Báez debe dejar de involucrarse en el afán de continuidad de un Golpismo perverso que pretende imponer a Empresarios y acaudalados, que son minoría, agrupados con “abortistas, feministas, narcotraficantes y delincuentes” como él mismo dice, que se implantaría sobre las Mayorías pobres y luchadoras, que en Nicaragua han encontrado, y encuentran, en este Modelo Cristiano, humanamente imperfecto pero mejorable, aliento y respaldo para los Afanes de Trabajo, Justicia Social, Paz, Seguridad y Bienestar.
Santo Padre, Hermano Papa Francisco :
Desde Nicaragua, Cuna de Rubén Darío y Escenario de Luchas y Martirio del valiente Obispo Antonio de Valdivieso, Nicaragua, Cuna de tanta Fortaleza Espiritual, nos presentamos a Usted con la Humildad y el Respeto que nos caracteriza, pidiendo de todo Corazón nos entienda y nos ayude a avanzar en la Reconciliación y la Paz, desde las Familias y Comunidades.
Con nuestras Propuestas de Políticas para una Cultura de Reconciliación y Paz, queremos generar Encuentro, y afianzar Valores de Armonía y Convivencia, trabajando desde las Escuelas, los Centros de Salud, las Comunidades, las Familias, y todas las Entidades, Públicas y Privadas, que podamos sumarnos a la restauración del Alma Buena de l@s nicaragüenses.
Desde la Fé, esperamos en Dios sus decisiones, con la Esperanza de continuar con Su Bendición, trabajando por la Paz y el Cariño que hemos venido afirmando todos estos años, con las Familias nicaragüenses y como Familia Cristiana de mucha Fé, mucha Tradición y mucha Fortaleza Espiritual, Cristiana y Solidaria.
Rezamos por Usted. Rezamos por Nicaragua. Rezamos a Dios Nuestro Señor todos los días, y a Nuestra Madre María, para que derramen Protección, Bendiciones, Trabajo y Justicia Social en esta Nicaragua, Siempre Bendita y Siempre Libre !
Que Dios Nuestro Señor, que Cristo Jesús, que los Ángeles y Arcángeles, sigan caminando con nosotros, Nicaragua Unida, escuchando, soñando y cantando al Nuevo Día Fraternal, Alegre y Solidario que Dios dispone para esta Tierra humilde y de tanta Fé.
Fuente: El 19 Digital
Esta entrada fue modificada por última vez el 26 de septiembre de 2022 a las 8:53 AM