El 30 de octubre de 1998 Nicaragua entera fue testigo de una tragedia nunca antes vista en la historia nacional. Un gran muro de piedra y lodo sepultó a más de 2 mil pobladores de las comunidades aledañas al Volcán Casitas, municipio de Posoltega. Fue el golpe más doloroso de todos los que había dejado el monstruoso Huracán Mitch.
Este viernes la población de Posoltega se ha unido a la Juventud y a las autoridades locales para conmemorar esa funesta fecha, en la que además no se olvida la indiferencia del gobierno neoliberal de la época.
Como parte de este 17 aniversario se está celebrando una misa en la parroquia local, un culto en el lugar de la tragedia y se están depositando ofrendas florales en el Parque Memorial erigido en honor a las miles de personas que perdieron la vida.
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Foto: Archivo/Referencial
Esta entrada fue modificada por última vez el 30 de octubre de 2015 a las 10:42 AM