Erlo Rudis Umaña Bonilla, a los 26 años se íntegro a las filas del Frente Sandinista de Liberacion Nacional en 1974, bajo la responsabilidad directa del comandante Camilo Ortega Saavedra.
Hoy tiene 70 años, vive en la comunidad San caralampio, Diriomo.
Hoy rememora como conoció al Comandante Camilo Ortega Saavedra.
«Una vez llego a mi casa en el Coyolar, una comarca de Diriomo, ahí conversamos y quedamos integrados haciendo el trabajo clandestino, lo alojamos en una casita de mis tíos, yo lo recibí hicimos una casita donde sólo ellos estaban, era la casa de seguridad.
Estábamos bajo la dirección del comandante Camilo Ortega Saavedra, el me encomendada tareas, yo le pasaba informes a él.
Lo que más puede recordarse era su popularidad, su carácter, fue alegre nunca tuvo mal carácter cuando trabajamos juntos, sabía dirigir, platicaba con los campesinos y obreros.
Como persona era humilde, honesto fraterno, el frente sandinista confío mucho en él, era admirado al trabajo, tanto así, que dejó la universidad para integrarse a la lucha revolucionaria.
Dentro de las tareas que nos daba era organizar al pueblo en células clandestinas alrededor del Frente Sandinista, preparando acciones contra la guardia somocista.
El sueño del Comandante Camilo era cambiar a Nicaragua, poner al pueblo en el poder, recuperar derechos que habían sido empañados, quitados por somoza.
Hoy ese sueño se está cumpliendo, en su mayoría él quería la libertad de expresión, derecho a la tierra, respeto a la mujer, integración de la educación al pueblo, salud y proyectos para el pueblo y es parte de lo que hoy el Gobierno está siguiendo, es lo que dice el Comandante ahora el pueblo Presidente, se está continuando el legado del Comandante Camilo Ortega.
Al Comandante Camilo se le llamaba el apóstol de la unidad, la última vez que lo vi fue el 2 de febrero de 1978, después de que nos tomamos la pólvora en Granada.
«Uno se sentía bien fortalecido con alguien que dirigía y que sabíamos que defendía el derecho del pueblo» refiriéndose, al Comandante Camilo Ortega Saavedra.
Recuerda que cuando cayó el comandante Camilo Ortega Saavedra, les afectó pero los que trabajaron con él se levantaron y dijeron que la lucha no terminaba ahí, que debían cumplir las promesas de Camilo.
Esta entrada fue modificada por última vez el 26 de febrero de 2016 a las 11:39 AM