Por: Stalin Vladímir Centeno
¿Un loco es peligroso? Sí, pero más aún si el loco tiene poder y es nada menos que el Presidente de la Argentina.
Claro, adivinaron, de ese mismo estamos hablando y hoy analizaremos en detalle los seis meses del Gobierno de Javier Milei.
Milei, el que en campaña andaba con una motosierra haciendo ruido y enganchando a la gente, prometiéndoles un cambio a esa ciudadanía que ya había perdido hasta las esperanzas y las ganas de soñar.
Milei, ese que se autoproclama el libertador, que tiene una melena entre león viejo de un zoológico abandonado y un Elvis Presley desaliñado.
Sí, Javier Milei, el que anda juntándose con otros locos como Elon Musk y Donald Trump. Sí, el tal Milei, el mismo que duda de la aplastante victoria del líder bolivariano Nicolás Maduro.
De ese Presidente Bipolar hablaremos en este artículo y desmenuzaremos su gobierno a tan solo medio año de que llegara al poder.
No sin antes advertir que el loco de Milei anda de rodillas ante los enemigos de la humanidad y ya entregó no solo su dignidad, sino hasta la soberanía del pueblo argentino.
Milei le entregó su alma al dólar, sueña con dolarizar la economía de Argentina y, como mal economista, no quiere entender o no sabe que el Dios dólar ya está de salida.
La política económica del polémico y controversial Javier Milei ha consistido básicamente en recortar salvajemente el gasto público y en aumentar algunos impuestos (como el Impuesto País) para poder alcanzar superávit público. Las partidas presupuestarias más afectadas, y con diferencia, han sido las pensiones, la obra pública, los salarios públicos, los subsidios a la energía y al transporte, el gasto universitario y las transferencias a provincias.
El loco Milei, autodenominado «liberal libertario,» está cumpliendo poco a poco su amenaza de acabar con el Estado, arrasando con la vida de la gente por el camino y poniendo a la venta el país a un precio de ganga, para que sean los grandes capitales nacionales y extranjeros, y no el pueblo, quienes decidan cómo será el futuro. No olvidemos que el superávit fiscal implica que las familias y empresas argentinas pagan más en impuestos de lo que reciben en servicios y prestaciones públicas, y todo ese dinero extraído de más no sirve para mejorar la economía del país sino simplemente para pagar a acreedores financieros, en su mayoría extranjeros, comandados por el Fondo Monetario Internacional.
La economía se ha desplomado por culpa de las políticas del llamado «Libertario, Milei»: el índice de Actividad Económica (EMAE) ha caído un 8,4% en comparación con el año anterior.
El Índice de Producción Industrial (IPI) se ha desplomado un 21,2%, un nivel promedio muy preocupante que esconde caídas terribles del 40% en algunos sectores como el de la maquinaria y equipo, muebles y colchones y otras industrias manufactureras y otros equipos, aparatos e instrumentos. La construcción también se ha hundido un 42,2% por culpa de la paralización de la obra pública. Estas graves heridas no serán restauradas pronto, sino que dejarán enormes cicatrices que marcarán a la industria durante mucho tiempo, incluso aunque las salvajes políticas de Milei dejaran de aplicarse mañana mismo. El panorama es desolador.
Es la primera vez en mucho tiempo que el salario promedio real cae por debajo del umbral de la pobreza, lo que ha disparado el número de pobres hasta casi el 60% de la población, unos niveles no alcanzados desde el corralito de 2001. Es decir, las políticas de Javier Milei están empobreciendo a los argentinos tanto como lo hizo aquella fatídica crisis económica.
Si la motosierra del Estado continúa, llegará un momento en que apenas haya inflación, pero eso sólo significará que la economía estará sencillamente muerta. Es como si un médico, para aliviar la fiebre del enfermo, decidiera simplemente asesinarlo. La fiebre desaparecería, claro, pero con ella la vida del paciente. Pues esto es lo que le está pasando ahora mismo a la economía argentina: las políticas de este Presidente loco la están matando.
Esta entrada fue modificada por última vez el 9 de agosto de 2024 a las 1:15 PM
