Durante la remodelación del balcón para evitar accidentes con sus hijos, los padres vieron materializado sus peores temores.
En China, un niño de tres años de edad cayó del decimoquinto piso y logró sobrevivir, pese a haber caído de cabeza.
En la ciudad de Changzhou, en la provincia de Jiangsu, los padres del infante habían decidido remodelar el balcón de su apartamento. Durante los trabajos, cuando el área se encontraba sin protección y los padres descuidaron al niño llamado Qi Qi, este se acercó al borde y fue a tener al pavimento en caída libre.
Los padres informaron que la remodelación del balcón fue precisamente para asegurar la seguridad de sus hijos, debido a que consideraban que las rejillas de éste estaban muy abiertas. Por esta razón, decidieron cambiarlas por vidrios antirobos para cerrar por completo el área.
Luego de que desmontaran los viejos vidrios para cambiarlos por los nuevos, bastó solo un segundo para que los peores temores de los padres se hicieran realidad.
La madre del niño fue testigo de su caída, y no pudo hacer otra cosa que correr pisos abajos para llegar hasta donde se encontraba el niño.
Aunque el menor pegó la cara al piso, está vivo y lleva varios días internado en el Hospital de Niños, Changzhou, sometido a un tratamiento intensivo, recuperándose de sus múltiples fracturas: fractura de cráneo, fracturas de costillas, fractura de la diáfisis femoral derecha, neumotórax izquierdo, contusión pulmonar y laceración hepática. Sin embargo, el niño aún todavía está en estado crítico.
Esta entrada fue modificada por última vez el 20 de abril de 2016 a las 10:46 AM