El ser humano ha llegado a límites que no debería sobrepasar, porque sería antinatural, tal es el siguiente caso que te contamos.
En el mundo existen lugares donde se comercia con animales de manera clandestina, un fenómeno que afecta a gran parte de las reservas naturales y parques de protección de animales, que se ven amenazados por la ambición y malicia del ser humano.
Los animales capturados son utilizados de diferentes maneras, desde ser cazados para alimentación como “afrodisiacos”, a ser mutilados para luego vender sus partes en el mercado negro, pero la razón que nos reúne hoy es la más aberrante y perversa de todas.
Aunque el tráfico ilegal ha existido desde la antigüedad, en el continente asiático, personas sin escrúpulos han comenzado a cazar orangutanes hembras para satisfacer sus bajos instintos carnales y satisfacer sus deseos sexuales.
En Tailandia existen “burdeles” donde utilizan orangutanes como esclavas sexuales, para satisfacer los deseos físicos de trabajadores de bajos recursos que “no pueden pagar por una chica”.
Son depiladas, bañadas, perfumadas y preparadas con ropas y maquillaje, para dar placer a una larga fila de clientes que no pueden pagar por una mujer.
En el 2014 se dio a conocer el increíble e indignante caso de la orangután “Pony”, que servía como esclava en Borneo. La hembra era muy famosa y popular entre los trabajadores, aunque por su tamaño la mantenían encadenada y sometida antes de “ver” a un cliente.
Esta práctica es antihigiénica e inhumana, pues los animales sufren terrible violencia física y son utilizados como objetos.
Diferentes organizaciones como PETA se han unido para evitar este tipo de prácticas, pero depende de nosotros los seres humanos, evitar que esto suceda, debemos tomar conciencia para que estos actos inhumanos no sucedan.
Jorge Rojas – Variedades
Esta entrada fue modificada por última vez el 14 de junio de 2017 a las 9:06 AM