ICE: la agencia gringa violadora de derechos humanos

Imagen Cortesía / Portada Stalin Magazine.

Por: Stalin Vladímir.

La agencia (ICE) (Immigration and Customs Enforcement) ha sido objeto de críticas y acusaciones por parte de organizaciones de derechos humanos, activistas y comunidades migrantes, quienes argumentan que en ocasiones sus prácticas violan los derechos humanos de los inmigrantes. Todo esto ha dejado de ser un mito. El mundo está estupefacto al mirar la forma cruel, inhumana, ilegal y violenta con la cual esta agencia supremacista captura y expulsa de Estados Unidos a personas inmigrantes que buscaban el tal «sueño americano». Son imágenes que parecieran sacadas de la película «el planeta de los simios», en las que los simios tomaban el poder, tenían el control y salían a realizar redadas para capturar a los humanos y someterlos. (ICE), la agencia gringa lo está haciendo hoy con la bendición de Donald Trump y con la complicidad de cientos de organizaciones de «derechos humanos», que están guardando silencio.

Muchos centros de detención de (ICE) han sido denunciados por estar superpoblados, lo que dificulta el acceso a servicios básicos como atención médica, alimentación adecuada y condiciones sanitarias. Ha habido casos documentados de personas detenidas que no recibieron tratamiento médico oportuno, lo que en algunos casos ha llevado a muertes evitables.

Reportes han señalado que algunos centros carecen de higiene adecuada, con problemas como falta de agua potable, baños en mal estado y espacios sucios. ¿Pero qué hace el imperio, para cambiar esto?, la respuesta es nada. Estados Unidos pretende que el mundo no vea la realidad en la que viven y que los exhibe como un país dictatorial que somete y humilla a los más vulberables y a su vez los discrimina por su raza y su condicion social.

Durante la primera administración de Donald Trump (2017-2021), se implementó una política de «tolerancia cero» que resultó en la separación de miles de niños y niñas de sus padres en la frontera. Aunque esta política ya no estaba en vigor, ahora se activó nuevamente desde su llegada a la Casa Blanca el 20 de enero en un segundo mandato. Muchos casos aún no se han resuelto, y familias siguen separadas. (ICE) ha sido criticado por no garantizar un proceso transparente y humano para reunificar a las familias, sus multiples violaciones a los derechos humanos, ahora están siendo documentadas en las redes sociales, desde la llegada a la Oficina Oval del huracán Trump. Las plataformas digitales están siendo un testigo incuestionable en esta nueva agresión que el imperio yanqui ejecuta contra una parte de la humanidad y que es dirigida por un hombre ambicioso, insaciable de poder qué ha traicionado a Dios, cuando nuestro creador lo salvó y le dio una segunda oportunidad de vida al permitirle sobrevivir al ataque y al casi certero disparo de un francotirador. En vez de volverse más humano, «Trump se bestializó».

Algunos inmigrantes han sido detenidos durante meses o incluso años mientras esperan una resolución de su caso migratorio. Esto ha sido cuestionado por organizaciones de derechos humanos, que argumentan que estas detenciones prolongadas son innecesarias y violan el derecho a la libertad personal. En algunos casos, se ha detenido a personas que buscan asilo, a pesar de que el derecho internacional protege a quienes huyen de la persecución o la violencia. Pero las instituciones norteamericanas parecen haber sido diseñadas para violar los derechos humanos y por lo tanto desde que esta agencia gringa (ICE) fue creada, sigue funciondo bajo una «legalidad podríamos decir, casi criminal».

Desde la llegada por segunda vez del republicano a la Casa Blanca. Ha habido denuncias de abusos verbales, físicos y psicológicos por parte de algunos agentes de (ICE) hacia los detenidos. También se han reportado casos de uso excesivo de la fuerza durante las detenciones y traslados. Algunos inmigrantes han sido deportados sin tener la oportunidad de presentar su caso ante un juez o acceder a asesoría legal, lo que viola el derecho a un proceso justo. La agencia (ICE) ha deportado a personas a países donde corren el riesgo de sufrir persecución, tortura o incluso la muerte, lo que contradice el principio de «no devolución» (non-refoulement) establecido en el derecho internacional. Pero este es solo una pequeña parte de una lista interminable de denuncias contra dicha agencia que funciona como el brazo represor de una polítca torpe antiinmigrante que Dondald Trump está ejecutando para congraciarse con sus simpatizantes radicales.

Las redadas y operativos de (ICE) han generado miedo y desconfianza en comunidades de inmigrantes, incluso entre aquellos que tienen estatus legal. Esto ha llevado a que muchas personas eviten buscar servicios esenciales, como atención médica o educación, por temor a ser detenidas. (ICE) ha defendido sus acciones argumentando que su principal objetivo es hacer cumplir las leyes de inmigración y proteger la seguridad nacional. Sin embargo, diferentes organizaciones han documentado numerosos casos que, según ellos, demuestran violaciones sistemáticas de los derechos humanos. La pregunta es, ¿qué pasaría si esto lo estuviese realizando cualquier otro país del mundo?, sencillo. Estados Unidos estaría condenando estos hechos, reconocería que son violatorios a los derechos humanos y seguramente estaría aplicando sus tales sanciones. Pero como la acción la están efectuando ellos, ¡muy bien gracias!

Algunos estados y ciudades en EE.UU. Han implementado políticas para limitar la cooperación con (ICE), conocidas como «ciudades santuario».

Organizaciones de derechos humanos y activistas continúan presionando para reformar el sistema de inmigración y garantizar un trato más humano hacia los migrantes. Pero mientras esta lucha continúa, es importante que Trump y la agencia (ICE), tengan muy presente que los inmigrantes no son ni delincuentes ni tampoco una carga para Estados Unidos. Los inmigrantes contribuyen con cientos de miles de millones de dólares al Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos cada año.

Para muestra un botón, aportan entre 1.2 y 1.6 billones de dólares al PIB anual. Pero además pagan impuestos federales, estatales y locales.

Además pagaron más de 11.7 mil millones de dólares en impuestos estatales y locales en 2018. A esta fecha representan aproximadamente 17% de la fuerza laboral total en Estados Unidos, según datos de 2022- 2023- 2024. En sectores como la agricultura, ellos constituyen más del 50% de los trabajadores. Así mismo tienen una tasa de emprendimiento más alta que los nacidos en Estados Unidos y son casi el doble de propensos a iniciar negocios, lo que genera empleos y crecimiento económico. Los gringos son una población que envejece, mientras eso ocurre los inmigrantes ayudan a mantener la fuerza laboral y a sostener programas como el Seguro Social a través de sus contribuciones fiscales.

Esta entrada fue modificada por última vez el 31 de enero de 2025 a las 3:58 PM