Manuel Guillén, el Plumífero de La Prensa

Foto Cortesía / Opinión: Manuel Guillén, el Plumífero de La Prensa.

OPINIÓN / Manuel Guillén, el Plumífero de La Prensa, escrito por Stalin Vladimir Centeno.

Manuel Guillén es el «plumífero» del golpista diario La Prensa. Guillén tira la piedra y esconde la mano, jamás se deja ver, se limita a dibujar desde su guarida y descargar ahí toda su frustraciones. Me pregunto porqué no es más visible para los 4 lectores digitales que aún le quedan al diario que era de la carretera norte y que ahora cae estrepitosamente y sin que nadie lo detenga al precipicio de la historia, fracasado, desprestigiado y casi por desaparecer. La cara de Manuel Guillén es poco conocida, será que él se cuida de ser visto porque es ¿feo o cobarde? Estoy seguro que por las dos. Manuel Guillén se quedó sin creatividad, lleva años que se limita solo en atacar y distorsionar el liderazgo del Comandante Daniel y la Compañera Rosario.

Disculpen por esta gran verdad que escribo pero el pobre Guillén que tiene 28 años sirviéndole a los Chamorros, ha envejecido ladrando y actuando como el perro de la chamorrada que le sueltan de la cadena para que muerda y desguace a los que esta familia oligarca ve como enemigos y un claro objetivo para atacar.

Las injurias, calumnias, difamaciones, extorsiones, amenazas y apología para delinquir cometidas desde sus desfiguradas malas caricaturas en nombre de la «libertad de prensa y de expresión» y en complicidad con La Prensa, le hacen merecedor cuando mínimo de una cadena perpetua sin derecho a revisión del proceso ni mucho menos a reducción de pena. Guillén actuando con cobardía y mostrándose poco hombre, lleva años cometiendo el delito de MISOGINIA, contra la compañera Rosario a la que descalifica, la ataca de forma hepática y visceral, su saña contra ella no solo es política sino que la hace a título personal y se va hasta ponerle e inventarle defectos físicos.

Ya que le gusta ser vil y poco hombre y le encanta atacar a las mujeres, entonces Guillén debería de comenzar con la propia doña Violeta que le publique una caricatura de su actual condición deteriorada de salud en sus 95 años y que haga otras caricaturas de cómo todos los años la pasó mangoneando su yerno el super ministro Toño Lacayo, ahí tiene bastante material para varias ediciones en La Prensa, pero yo no las diré porque no caería en el triste papel de Manuel Guillén, ah pero además puede dedicarle no una, sino varias caricaturas a la Cristiana Chamorro a quien la Fiscalía acusó de utilizar la Fundación Chamorro para convertirla en lavandería de dólares.
Dale Manuel Guillén, te leo, ponete creativo.

Una vez Guillén fue preguntado por sus caricaturas en La Prensa y cínicamente respondió que él es un «fiscalizador de la cosa pública» su respuesta es tan aberrante como de aberrantes son sus deformidades que escribe para en el negocio familiar dinástico, también conocido como el partido de papel. ¿Acaso a Manuel Guillén lo eligió la Asamblea Nacional como Contralor de la República? Díganme cuándo porque no me di cuenta, por otra parte, ¿el Parlamento lo nombró Fiscal General de la República?, quiero saber también si los Magistrados de la Corte Suprema de Justicia lo nombraron Juez o acaso es ¿Policía?, en su vida Guillén no ha tenido lo que las gallinas ponen para someterse al escrutinio de todo un pueblo, recorrer todo un país, presentar un plan de Gobierno, actuar con estrategias, demostrar liderazgo y por lo tanto ganar a pulso unas elecciones nacionales ya sea para ocupar un escaño en la Asamblea Nacional, una alcaldía de un departamento o más importante aún convertirse en un Jefe de Estado. Si Guillén no ha hecho nada de esto, eso significa que no es fiscalizador cómo así mismo se describe, pues en los barrios se les conoce a estas personas como chismosos, cuecheros, vagos sin vida propia, eso es lo que Guillén hace todos los días desde sus pésimas caricaturas en La Prensa.

PLUMÍFERO DE LA PRENSA

Pero otro dato importante del por qué Manuel Guillén no es el fiscalizador que dice ser, es porque tiene años y años viviendo en el imperio norteamericano, en otras palabras no conoce la realidad que vivimos en Nicaragua y su odio hacia Daniel y Rosario jamás le dejarán ver que desde 2007 Nicaragua es otra, porque la Compañera implementó novedosamente 60 programas los cuales cuando escucho al pueblo hablar de ellos, muestran agradecimiento y manifiestan que les ayudó a cambiar su vida para bien, lo que Guillén y La Prensa jamás dirán es que gracias a Daniel y Rosario hoy Nicaragua, tiene más hospitales que cualquier otro país centroamericano, tampoco dirá que Nicaragua tiene el 100% de electricidad, así mismo que tenemos carreteras de primer mundo, que el Gobierno sandinista acabó con la extrema pobreza y que ya los pocos pobres que existen en Nicaragua se cuentan con los dedos de las manos, el plumífero de La Prensa jamás reconocerá que el Gobierno del Comandante Daniel y la Compañera Rosario, es el mejor en la historia de nuestro país.

Recuerdo que en abril de 2021 el partido CxL pidió a la directiva del diario La Prensa, la cabeza de Manuel Guillén porque este sacó una caricatura en la que acusaba de autoritaria a la Presidenta del Partido Kitty Monterrey y la exhibía con uniforme del partido nazi y observando sobre una pila de cadáveres sangrantes y atribuyéndole las siguientes palabras; «La casilla por encima de todo, y la casilla soy yo…». El partido CxL en su carta de queja a La Prensa manifestó que era un insulto personal y un evidente ataque de odio contra una mujer al tiempo que calificaron la publicación de injuriosa y denigrante.

Pero antes, en el año 2012 un grupo LGTB denunció a Manuel Guillén por homófobo. Señalaron que una caricatura publicada en La Prensa y de la autoría de Guillén, hacía alusión clara al hecho de que la condición de transgeneridad es una aberración, con lo cual lastiman, denigran, violentan, discriminan, promueven al odio y la intolerancia hacia las personas Trans. En un comunicado, los activistas “hacían un llamado a la Sociedad Interamericana de Prensa y a Periódicos Asociados Latinoamericanos (dos organizaciones a las que está afiliada La Prensa) a que se pronunciaran por esa clara y directa muestra de violación de los derechos humanos de las personas y por la intolerancia que demostraron al publicar esa caricatura. Alegaban que no podían concebir que organizaciones como estas tengan entre sus miembros a entidades como La Prensa que claramente violan (bajo el argumento de «informar») los derechos humanos más básicos de las personas”.

Agregaron en ese entonces que “el derecho a informar NUNCA puede estar por encima de los derechos básicos de los seres humanos, ni violentar (o promover la violencia hacia) su integridad personal, emocional y/o psicológica en general. Por lo que reiteraban que no se justifica bajo ninguna circunstancia el promover prejuicios bajo el argumento de «informar».

En el 2018 La Prensa, se convirtió en un cuartel de Operaciones claramente terrorista y Manuel Guillén fue parte de ese entramado golpista. El pueblo recordará a Guillén si es que eso pasa, como el golpista que fue derrotado y aplastado por la paz que el sandinismo sembró en Nicaragua.

Esta entrada fue modificada por última vez el 23 de diciembre de 2024 a las 8:42 PM