Louis, nieto e hijo de dos chilenas abatidas en el Bataclan, logró esconderse y huir del recinto
El nieto de cinco años de Patricia San Martín, una de las chilenas que figura entre las víctimas de los atentados de París ocurridos este viernes, logró escapar de la sala Bataclan donde había acudido acompañado de su madre y de su abuela, quienes fueron abatidas por los terroristas.
Louis, el pequeño de cinco años, se escondió al escuchar los disparos y logró escapar del recinto.
«El pequeño, según nos contaron, al escuchar los disparos, se escondió en el teatro y luego escapó», explicó la hermana de la fallecida, María Eliana San Martín, en declaraciones a El Mercurio.
«Fue encontrado en la calle por una mujer. Está a salvo, ileso, pero ya sin su madre ni su abuela», añadió San Martín quien ayer se reunió con los otros dos hermanos de la fallecida para concretar su viaje a Francia.
La chilena Patricia San Martín, de 61 años, y su hija nacida en Francia, Elsa Veronique Delplace San Martín, de 35 años, son dos de las tres víctimas chilenas que fallecieron este viernes en el atentado en la sala de conciertos Bataclan, según confirmó este sábado la cancillería chilena.
El músico chileno Luis Felipe Zschoche Valle, de 35 años y radicado en París, fue la tercera víctima chilena asesinada por los terroristas en el teatro parisino.
David Fritz, un joven nacido en Pucón, en el sur de Chile, que también se encontraba en el interior de la sala Bataclan durante los atentados sobrevivió después de permanecer varias horas como rehén de los terroristas.
«Ellos no pensaron en dejarme vivo sino que no tuvieron tiempo de matarme porque los policías llegaron», relató Fritz a los medios locales.
«Me apuntaron con una metralleta. Me preguntaron de qué origen era y cuál era mi trabajo», comentó el joven que se desempeña como barman en un local parisino, un trabajo que compagina con su pasión por la guitarra.
«Siempre quedaba una persona con nosotros, otro se daba vueltas. De un momento a otro cuando habían pasado 30 minutos, uno dijo: ‘Hay que llamar a un negociador’. Esto fue como una película», recordó.
El joven permaneció como rehén junto a dos amigos y se pudo comunicar con su familia casi seis horas después del ataque cuando las imágenes de los atentados ya habían dado la vuelta al mundo.
«Momentos después, cuando ya confirmamos que David estaba dentro, supimos que estaba como rehén junto con su amiga y un amigo», relató su madre, Ximena Geoppinger, a través de un vídeo publicado en los medios chilenos.
«Hubo una explosión cerca de la puerta. Era la policía, como 50. Nos hicieron caminar hacia ellos, nosotros nos encontrábamos al medio: los policías en un lado y los terroristas al otro (…) Para mí fue todo muy rápido, como cinco segundos», describió Fritz.
Esta entrada fue modificada por última vez el 16 de noviembre de 2015 a las 9:23 AM