Petro, Milei, Boric, los 3 «Chiflados»

Por, Stanlin Vladímir.

Tuve la tentación de titular; «Petro, Milei, Boric, los 3 Chiflados incapaces», pero preferí despacharme hermoso en el contenido. Decir que estos tres «bobertos» son chiflados es demasiado obvio, porque las caras jaladas, deformes, feas y tétricas los delatan. Mejor analizaré la fracasada gestión que tuvieron cada uno de ellos en sus respectivos gobiernos en este 2024 que pronto culminará.

Gustavo Petro, Presidente de Colombia, es un inepto, tiene más defectos que cualidades. Utiliza sus redes sociales para atacar y decir mentiras, es una manera de disfrazar su incapacidad y la de sus ministros. Petro es un mitómano por excelencia, los colombianos ya lo ubican como el peor Presidente en la historia de ese país. Ve fantasmas donde no los hay para después justificarse diciendo que no lo dejaron gobernar.

Las encuestas todas lo crucifican, y no es para menos, pues los colombianos se hastiaron de la corrupción, la ineficiencia y las amenazas constantes que hace él y su pandilla de ministros buenos para nada. Ah, pero le encanta criticar a los líderes de Nicaragua y de Venezuela. Me pregunto, ¿por qué, en vez de ver la paja en el ojo ajeno, no ve la gran viga que tiene en el suyo?

Petro piensa que aún puede darle atol con el dedo a los colombianos, tal y como lo hizo en la campaña electoral, donde se vendió ante el pueblo como la esencia pura de la izquierda latinoamericana, sin mencionar que de tantas promesas que hizo como candidato, no ha cumplido ninguna. Petro se ha vuelto aburrido, cansón, sus discursos llenos de retórica, citas y personajes ya no riman, ya no atraen. Y si por casualidad está pensando en reelegirse, ojalá que no lo haga, porque el pueblo le dará hasta por debajo de la lengua. Lamentablemente, esta pesadilla que viven los colombianos llamada Gustavo Petro tendrán que aguantarla hasta el 2026, cuando el exintegrante del M-19 se irá para siempre.

Javier Milei, el Presidente de Argentina, que se deja crecer su melena para que lo comparen con un león, cuando en la realidad es el gato del dictador Donald Trump. Milei es un ultraderechista extravagante, vulgar y ordinario que ganó la presidencia en Argentina a punta de tapazos y asumió el cargo el 10 de diciembre de 2023. En campaña, andaba de arriba para abajo con una motosierra en alusión a que, cuando llegara al poder, haría un recorte en todos los ministerios, acabaría con la burocracia y bajaría el gasto institucional. Además, enganchó al pueblo iluso argentino prometiendo que acabaría con la inflación.

En cada programa al que era invitado, hablaba mal de China y decía que no quería saber nada de los comunistas, pero después se le arrastró a los pies al gran líder chino Xi Jinping. Gritaba a los cuatro vientos que lucharía contra «la casta». Pero, hablando con la verdad, desde su llegada a la Casa Rosada, aumentó la pobreza en Argentina. Milei es tan miserable que le quitó los medicamentos gratuitos a los pobres jubilados. No solo eso, pues no oculta sus intenciones de gravar la salud y la educación de los extranjeros. Para atender las necesidades sociales dice no tener dinero, pero bien que se tiene un jugoso bisne con los colonialistas europeos, a quienes les paga con millones de euros para comprar equipos destinados a las fuerzas armadas.

El «Pinochetito» Gabriel Boric, tal y como una vez lo bautizó acertadamente el Comandante Daniel Ortega, subió al poder en Chile el 11 de marzo de 2022 y, para desgracia de los chilenos, su desgobierno finalizará hasta el 11 de marzo de 2026. Al igual que los dos chiflados anteriores, este tercer chiflado está siendo arrollado por las encuestas. Los chilenos le están cobrando su inexperiencia, la inflación que está por las nubes y la criminalidad organizada que prácticamente gobierna desde abajo en ese país. Normalmente, los chilenos han lidiado con una inflación del 2 o 3 %, pero ahora se ha disparado con la llegada de Boric entre el 8 y 9 %.

El incompetente de Gabriel Boric había hecho una proyección de crecimiento económico de cierre para este 2024 del 2,6 %, pero el índice mensual de actividad económica anota una variación anual de cero, lo que pone una lápida a la proyección de crecimiento anunciada por el «Pinochetito».

El remedo de Gobierno de Boric se ha caracterizado por enemistarse gratuitamente con los otros poderes del Estado, adoptar malas decisiones y generar constantemente incertidumbre. Cuando es increpado por su pésima gestión, se excusa diciendo que había recibido un país en crisis, pero que ahora «estaba andando». Entre los grandes problemas que Boric, desde el inicio de su gestión hasta hoy, diciembre de 2024, no ha podido resolver, está la migración. El país sigue enfrentando una recesión, el desempleo se incrementó, la inflación es un fantasma que se deja ver por las calles, la clase media no puede acceder a una vivienda digna, hay violencia urbana y rural, y a esto se le agrega el terrorismo. El punto es que muchos de estos problemas ya existían, pero es con la llegada al poder de Boric que estos mismos problemas se han incrementado.

Este «barbudo incompetente» que los chilenos tienen de Presidente solo se dedica a hacer «control de daños», pero no a resolver los problemas de la gente. Es importante señalar que, hoy, Chile, gracias a Boric, está enfrentando bajos niveles de inversión nacional y extranjera, la educación pública está desnucada, y nadie parece que quiera o pueda componerle la cabeza. En conclusión, retomando lo que Boric ha dicho de que, con su gestión de gobierno, el país está «andando», yo le diría que, más bien, el país, desde que él asumió el poder, está «cojeando».

Esta entrada fue modificada por última vez el 31 de diciembre de 2024 a las 5:14 PM