Un total de 156 carretas peregrinas de Granada y Masaya se preparan para salir el 15 y 16 de marzo respectivamente, en el tradicional peregrinaje rumbo al Santuario de Jesús del Rescate en Popoyuapa, Rivas.
Esta es una tradición centenaria y religiosa que se trasmite de generación en generación, como muestra del fervor cristiano y fe hacia esta imagen milagrosa.
Los peregrinos son personas muy devotas que desde ya cuentan con los accesorios y materiales tradicionales que usan para preparar sus carretas, las cuales son forradas con plástico y guate de maíz, que sujetan con mecate de plátano a una armazón de bejuco de chaperno y varillas de guácimo, tigüilote o caña de castilla. El guate también les sirve de comida para los bueyes que halan la carreta.
También portan la bandera azul y blanco y la de la Iglesia Católica. Asimismo, son decoradas con banderines plástico y globos morados, en alusión al color del manto de Jesús del Rescate.
La familia Vásquez Medina en la comarca La Loma de la ciudad de Masaya, llevará 6 carretas de las 80 que saldrán de este departamento y ya están listos para partir a las 6 de la mañana el 16 de marzo desde la casa del mayordomo Juan Pascua, ubicada de las 4 esquinas de Monimbó una cuadra al este media al sur, de Dulcería Daleana.
Juana Paula Medina, de 72 años, y Máximo Vásquez, de 74, viajan cada año en carreta y esa tradición se la han heredado a sus hijos.
Doña Juana dice que primero fue con sus abuelitos y sus padres. Una vez que se casó empezó a llevar a sus hijos, y ellos a la vez a sus nietos.
Para este 16 de marzo dijo estar lista con el “aliño”, el cual consiste en llevar arroz, frijoles, gallinas, guineo y carne que preparan en el trayecto.
José Javier Vásquez es uno de los hijos de esta pareja y lleva aproximadamente 33 años de viajar en carreta hacia Popoyuapa. Su esposa Rosa María López lo acompaña desde hace 20 años y también participa del forrado de la carreta.
“A mí me gusta ir a los viajes porque es bonito y por promesa que debemos de mis hijos (…), cuando mi niño se grabó con neumonía los doctores me decían que no iba a vivir y le pedí a mi Jesús del Rescate que me lo salvara y gracias a Dios él está vivo, y ahora tiene 22 años”, apuntó Rosa María.
Por su parte, José Javier, expresó que la preparación de la carreta se hace 8 días antes y construyen las “casas” un día antes de partir. En ellas montan guineos, pailas, sillas, hamacas, vestuario, agua, leñas y demás productos útiles en el viaje.
Don Juan José Pascua, mayordomo de las carretas peregrinas de Masaya, mencionó que son 3 años que lleva en el cargo y a partir del 11 de marzo empieza en su casa con los preparativos de rosquillas, chicha de maíz, nacatamales y comida que reparte a los participantes antes de salir.
Mencionó que ellos hacen tres estaciones siendo la primera en El Coyolar entre Nandaime y Diriomo, la segunda en Puente Ochomogo y luego a Gil González. “Son tres días de trayecto porque ya ellos realmente entran el Miércoles de Dolores al Santuario de Popoyuapa”, indicó.
Peregrinos granadinos
De Granada este año saldrán 76 carretas peregrinas de las comarcas Laguna 1 y 2, El Capullo, San Matías, Prusia, El Pochote, El Hormigón y Caña de Castilla.
Según el presidente de las carretas peregrinas de Granada, Rosendo González, el punto de reunión será en la Plazoleta de La Pólvora el 15 de marzo, de donde saldrán hacia el Cementerio General para ser despedidos y enrumbarse hacia Rivas.
Las carretas peregrinas en su trayecto harán 5 estaciones en los lugares de Empalme de Guanacaste, sector de mercado en Nandaime, en Toco-río La Cabeza, Puente Ochomogo y Puente Gil González.
Doña Juana Martínez Aguilar, de 78 años, es habitante de la comarca la Laguna #2 y dijo que esta tradición es heredada de sus padres Maximiliano Martínez y Juana Aguilar, desde los 11 años cuando empezó a ir.
Relata que se iban por vereda pasando por Belén, no sesteaban donde se hace ahora en el Puente Gil González. “Cuando llegábamos nos salían a encontrar diciendo ¡ay vienen las granadinas! y nos esperaban con café y pan, de ahí salíamos a Popoyuapa”.
Actualmente ella no cuenta con carreta ni bueyes, por lo que tendrá que alquilarla para no dejar de ir. “Yo tenía mi carreta, iba en ella, pero como se muere mi marido y mi hijo, entonces yo vendí la carreta y los bueyes”, señaló.
Aun así, doña Juana dijo estar lista para este 15 de marzo: “De araños y pellizcos le digo a mi hijo, nosotros no nos quedamos. Sea como sea. Aunque lleve arrocito y frijoles, no me quedo. Yo le pido a Él que me mantenga sana que yo de cualquier manera me voy”, subrayó.
En su sencillez y humildad, esta devota describe lo que siente cuando está frente a la imagen de Jesús del Rescate lo que la empuja a siempre visitarle: “Cuando voy llegando siento unas ganas de llorar, y cuando estoy viéndolo, pienso que de las lágrimas que boto me parece que Él está botando las lágrimas. Y le digo, así como me trajiste aquí, así llévame de vuelta y no me pase nada en esa carretera para que el próximo año vuelva a visitarte”.
Su hija Ángela González Martínez, de 53 años, tiene 5 años de viajar. Recuerda que la primera vez, aunque llevaban carreta se fue a pie con sus hijos hasta Rivas, para pagar la promesa de su esposo Rosendo, quien es diabético y en una ocasión que fue al hospital los doctores le dijeron que perdería la vista.
“Yo le dije a mi Jesús del Rescate que me ayudara: vos sos el único que me podés ayudar. Y cuando ya veníamos de regreso me dijo que ya podía ver, entonces quedamos con la promesa que teníamos que ir a pagar”, expresó Ángela.
Una señora que enlistaba a los participantes de la comunidad les animó a ir y así fueron a pagar su promesa y quedaron yendo. Cuenta que desde el 11 empiezan a preparar la carreta y los alimentos que deben llevar. En total van 7 miembros de su familia.
Fuente: El 19 Digital
Esta entrada fue modificada por última vez el 4 de marzo de 2018 a las 9:07 AM