Parlamentarios de fuerzas progresistas del Mercado Común del Sur (Mercosur) denunciaron un intento de restauración conservadora y resurgimiento del neoliberalismo en la región.
Asimismo, reafirmaron su apoyo a los gobiernos democráticamente electos de Argentina, Brasil, Ecuador y Venezuela, que están impulsando procesos de transformaciones, y alertaron sobre los planes de revertirlos.
Sectores conservadores, aliados con grandes oligopolios de comunicación y sectores de derecha, están desplegando intentos de desestabilización democrática, deslegitimación y cuestionamiento de la voluntad soberana, señalaron.
Tras participar la víspera en una sesión del Parlamento del Mercosur (Parlasur), legisladores de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela emitieron una declaración de la «Bancada Progresista».
El texto agrega que la respuesta a esas acciones debe ser la articulación de las organizaciones políticas de izquierda, populares y progresistas con estrategias comunes.
Nuestra región, subraya es una zona de paz, con plena vigencia de la institucionalidad democrática y el respeto de los derechos humanos.
Más adelante, en un comunicado, las fuerzas políticas de la subregión reiteraron su solidaridad con Venezuela, frente a prácticas injerencistas y desestabilizadoras, con clara intervención de Estados Unidos.
En ese sentido, manifestaron su preocupación por la presencia de la transnacional petrolera Exxon Mobil en un territorio bajo litigio entre Venezuela y Guyana, que constituye, dijeron, un riesgo para la paz regional y obstaculiza el diálogo.
Además, la Bancada Progresista del Parlasur denunció un «golpe a la paraguaya» en Brasil, similar al que destituyó al presidente Fernando Lugo.
No queremos que se detengan las transformaciones ni se retroceda en los derechos de las minorías y de los movimientos sociales, como se está chantajeando al Gobierno a someterse a una agenda neoliberal que no fue votada en las urnas, sostuvieron.
En otro punto, alertaron sobre la persecución de los movimientos sociales y la violación de los derechos humanos en Paraguay.
Asimismo, reiteraron su respaldo a la unidad del Mercosur y el Parlasur, señalaron la importancia del ALBA, Petrocaribe, Unasur y la Celac, y cuestionaron el Tratado Internacional de Comercio de Servicios.
Esta entrada fue modificada por última vez el 18 de agosto de 2015 a las 3:36 PM