SAN JUAN DEL SUR – NICARAGUA / En el municipio de San Juan del Sur, departamento de Rivas, se encuentra el Refugio de Vida Silvestre La Flor, una joya natural de 7 mil 349 hectáreas que sirve como santuario para el desove de miles de tortugas marinas de la especie Paslama.
Este espacio, de gran importancia ecológica, se ha convertido en un símbolo de la conservación de la biodiversidad en Nicaragua.
Con motivo de las vacaciones de fin de año, el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, a través del Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales (MARENA), invita a las familias nicaragüenses a conocer y disfrutar de este entorno privilegiado.
LIBERACIÓN DE TORTUGUILLOS
La Flor ofrece una experiencia única de contacto directo con la naturaleza, con actividades como senderismo, camping, caminatas, avistamiento de aves y la liberación de tortuguillos nacidos en el vivero de la estación biológica.
Este refugio ha recibido a más de 2 mil 500 turistas nacionales e internacionales durante el año, reflejando el creciente interés por admirar a estas criaturas prehistóricas que han habitado los océanos durante millones de años.
Nicaragua tiene el privilegio de ser hogar de cinco de las siete especies de tortugas marinas que existen en el mundo: carey, cabezona, tora, verde y paslama.
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Este hecho resalta la necesidad de protegerlas, una tarea que se impulsa a través de la Campaña Nacional “Junt@s conservamos nuestras tortugas marinas” y su plan interinstitucional, promoviendo la conciencia y el compromiso colectivo.
El Refugio de Vida Silvestre La Flor no solo es un espacio de conservación, sino también un destino que combina belleza, educación y sostenibilidad, permitiendo a las familias disfrutar de unas vacaciones diferentes, conectadas con la naturaleza y comprometidas con su cuidado.
Esta entrada fue modificada por última vez el 25 de diciembre de 2024 a las 4:06 PM
