La velada del sábado con tres grandes batallas en 115 libras puede tener muchos resultados, pero hay uno que es inamovible: el éxito anticipado de la cartelera.
Y no es poca cosa para una división que no hace mucho tiempo era ignorada por el gran público y es considerada, incluso, para ser parte de eventos de PPV. El segundo «Superfly» repite a algunas figuras del primero e incorpora a otras, pero no pierde su enorme expectativa.
En la primera velada solo fueron súper moscas, para la segunda habrá un duelo en 112 libras entre veteranos de muchas batallas como el filipino cuatro veces campeón Donnie Nietes y el argentino tres veces monarca Juan Carlos Reveco, en lo que puede ser la previa de Nietes antes de su salto a la división inmediata tras el título vacante de la OMB.
El primer Superfly fue para muchos la cartelera del 2017 y su segunda edición amenaza con repetirnos la misma dosis de expectativa.
Muchas razones pueden explicar el fenómeno, pero hay dos pilares esenciales para su crecimiento: la presencia de una generación de mucha calidad y el éxito mediático de Román «Chocolatito» González.
Se podrá estar de acuerdo sin excepciones con la presencia de una generación excepcional en estas divisiones y se podrá discrepar o estar de acuerdo con el papel que en esta historia le corresponde al cuatro veces campeón nicaragüense, pero es imposible desconocer su papel a la hora de empujar el brillo de los moscas.
«Chocolatito» encendió la luz de las divisiones menores tras aparecer al frente del más respetado ranking Libra x Libra. Ese día, mucha gente se enteró de su existencia, toda la comunidad de medios que le da cobertura al boxeo se hizo eco, las redes sociales elogiaron o criticaron hasta el cansancio el inédito acontecimiento y el nicaragüense se volvió una celebridad de una hora para la otra.
Por ello estuvo en la programación de HBO acompañando peleas de Gennady Golovkin, por ello no dudaron en colocarlo al frente de una cartelera en Los Ángeles sin tener origen mexicano y su éxito no dudamos que inspiró la realización del primer Superfly que lo tuvo a él como primera figura y en consecuencia fue elevado a la condición de «hombre a vencer»
Pero no ha sido la única razón para el crecimiento de los pequeños. Ese crecimiento ha sido posible debido a todos los campeones que lo rodean. Estrada, Cuadras, Inoue, Rungvisai, Ancajas. Esos son solamente algunos de los nombres que se suman a los que llegarán luego desde las 112 o 108 libras y que han transformado a estas divisiones en una suerte de «usina de talento» para abastecer al mejor boxeo.
Fuente: ESPN
Esta entrada fue modificada por última vez el 21 de febrero de 2018 a las 9:33 AM