Un hombre de 90 años murió cerca de una estación de metro en el norte de Londres cuando las fuertes ráfagas de viento lo empujaron contra un autobús que estaba circulando, indicó la policía.
En el noroeste de Inglaterra, pueblos y ciudades quedaron inundados. En algunas localidades el agua alcanzaba más de un metro y medio de altura.
El primer ministro David Cameron indicó que los equipos de socorro estaban trabajando para llevar «una respuesta rápida» y «ayudar a quienes lo necesiten».
La agencia para el medioambiente de Inglaterra emitió más de 130 alertas por inundaciones, principalmente en el norte del país, de las cuales más de 40 con nivel alto, lo que supone un riesgo mortal.
«El nivel de los ríos en el norte de Inglaterra ya es alto y prevemos graves inundaciones», declaró Jonathan Day, responsable de la agencia encargada de los riesgos de inundaciones.
En el pueblo de Shap, en el condado de Westmorland (noroeste), cayeron el sábado precipitaciones equivalentes a todo el mes de diciembre, según los servicios meteorológicos.
En Escocia fueron pospuestos partidos de fútbol y rugby.
Esta entrada fue modificada por última vez el 6 de diciembre de 2015 a las 10:10 AM