Un joven se encontraba almorzando en el comedor de su instituto cuando un trozo de comida se le quedó atascado en la garganta.
El estudiante no podía respirar y estuvo cerca de asfixiarse. Por suerte, uno de sus compañeros logró salvarle la vida aplicándole la maniobra de Heimlich, la cual consiste en presionar el abdomen desde atrás para desbloquear las vías respiratorias.
Esta entrada fue modificada por última vez el 24 de marzo de 2017 a las 2:44 PM